BILBAo - “Frustrante”. Esa es la sensación que cundió en la Cámara de Comercio de Bilbao cuando los servicios jurídicos leyeron el decreto del 29 de diciembre con el que el Gobierno central modificó el reglamento del IVA de importación. El problema que arrastran los importadores vascos desde 2015 no ha quedado resuelto ya que se ha establecido un mecanismo que sigue penalizando a Euskadi.

La cuestión afecta a empresas que tributan a las haciendas forales, tanto a las de la CAV como a las de Nafarroa. De ellas, unas 400 están en Bizkaia. Lo que ocurre es que las diputaciones y el Gobierno foral gestionan todo el IVA menos el de las importaciones. Cuando el Gobierno central decidió que los importadores pagaran directamente el IVA en la aduana se rompió la cadena que permitía a las empresas vascas reducir la factura compensándolo con el IVA que presentaba en sus autoliquidaciones en la Hacienda foral. El canal siguió abierto sin embargo para las compañías de otras comunidades y la Cámara de Bilbao denunció ante la Justicia la normativa por entender que “discriminaba” a Euskadi y Nafarroa. El Supremo le dio la razón, pero entendió que se trataba de un problema político y dejó su solución en manos de la Administración española.

el plazo del 15 de enero El nuevo mecanismo que entra en vigor este año incide en el mismo agravio comparativo. Las empresas vascas tienen de plazo hasta el próximo lunes 15 de enero para inscribirse en un registro y pagar el IVA de importación en la Agencia Tributaria en lugar de en la aduana.

Sin embargo, tendrán que esperar a que su Hacienda foral contraste con la del Estado la operación para compensar el IVA que paga con lo que, como ocurre ahora, la operación tardará varios meses en materializarse. Y quedarán bloqueados unos recursos de financiación muy importantes para las compañías. La Cámara cree que la solución es un acuerdo de colaboración entre administraciones para que se encomiende la gestión de ese IVA a las haciendas forales. - A.D.M.