BILBAO - El tomar “una pequeña participación”, ya que “no queremos mayorías”, por parte del Gobierno Vasco en una empresa de carácter internacional como CAF “muestra una señal de implicación del país”. Además, una inversión de este tipo tiene que ser capaz de generar una “economía adicional al país y ayudar a avanzar a una empresa”. “No tiene nada que ver en este caso con empresas en dificultades, son dos aspectos diferentes y quien quiera mezclarlos o no quiere entender lo que sucede o no es consciente de las necesidades reales de las empresas del tejido industrial vasco”, señaló ayer la consejera de Desarrollo Económico del Ejecutivo vasco, Arantxa Tapia, en una entrevista en la Ser.

La consejera defendió “inversiones” como la entrada en el capital de CAF, ya que “la participación pública es importante en determinados momentos” y muestra “una señal de implicación del país”. Recordó que Euskadi es “un país pequeño que quiere actuar en un mundo global con competidores internacionales de primer nivel y de dimensión mayor”. “Nuestra empresa necesita encontrar ese nicho especial que le permita seguir compitiendo”, afirmó.

En este sentido, Tapia defendió la conveniencia de la inversión, ya que, “si no, no la hubiéramos hecho” y recordó que se trata de una cuestión que está “en el programa de gobierno” y el propio lehendakari, Iñigo Urkullu, en la recepción del pasado día 27, hablaba de las “actuaciones de un fondo de inversiones publico-privado de estas características”.

“Hablamos de arraigo, pero también de muchas otras cosas. Hablamos de hacer inversiones en sectores estratégicos para el país, con capacidad tractora, que sean capaces de generar economía y empleo, que tengan capacidad de internacionalización, que les ayude a mejorar tecnológicamente, a crecer...”, resaltó, para añadir que el Gobierno Vasco cree que “tiene que hacer” este tipo de inversiones ya que “la participación pública es importante en determinados momentos”.

Cuestionada por el riesgo de que empresas estratégicas vascas puedan caer bajo el control de entidades extranjeras, Tapia reconoció que no se puede poner “puertas al campo” y se debe ser consciente de que las empresas locales también son, “en muchos casos, multinacionales”.

“En un mundo globalizado hay que ser conscientes de que empresas vascas compran empresas internacionales y que empresas internacionales pueden venir a Euskadi a hacer sus inversiones”, añadió.

Respecto al anunciado fondo de inversiones estratégicas, Tapia afirmó que el objetivo es que los 250 millones de euros sea “una cifra con la que empezar a trabajar” y recalcó que en estos momentos se están detallando sus “últimos aspectos” y en los próximos tres o cuatro meses estará “absolutamente definido”. “En unos casos podremos tomar participaciones de carácter más permanente, a largo plazo, y en otro casos tomar participaciones que permitan a una empresa abordar una internacionalización y crecimiento a corto plazo”. - Europa Press