BILBAO - Las necesidades de financiación de las empresas vascas se ha situado ya a niveles previos de las crisis. Todo un síntoma de la recuperación a jucio de Kutxabank, que ha concedido crédito a pymes por valor de 1.500 millones de euros en el nueve primeros meses del año. Los prestamos empresariales del banco vasco han crecido un 10% en ese periodo, pero lo más importante es que la financiación destinada a inversiones productivas ha aumentado un 44%.

Ese dinamismo es “reflejo de la mejoría económica”, subrayó Kutxabank. Se da la circunstancia además de que los ritmos de septiembre fueron especialmente llamativos, con un repunte del 35% en las operaciones y del 56% enlos créditos para inversiones productivas. Lo habitual es que septiembre sea un mes de “transición” tras la vuelta de las vacaciones en el que las empresas estudian nuevas operaciones que se materializan en el último trimestre del año, el más activo en lo relativo a la financiación.

El caso es que este ejercicio han preferido no esperar y han redoblado el pulso inversor, lo que “confirma el acercamiento de las necesidades de financiación del tejido productivo y empresarial a niveles previos al estallido de la crisis”.

A su juicio, los buenos datos de septiembre hacen presagiar, además, un buen cierre del ejercicio, en línea con los objetivos marcados por el Banco, que, según recordó, es líder en el segmento de financiación a la pequeña y mediana industria de Euskadi. En concreto, según precisaron, seis de cada diez pymes vascas confían en Kutxabank como su entidad preferente. Desde el punto de vista financiero, ha precisado que la mejoría del entramado económico-empresarial co-menzó a hacerse patente en 2014, año en el que Kutxabank constató una “curva ascendente” en la financiación del circulante de las empresas. Según apuntó, en 2015 se registró un “creciente despegue” de la financiación para inversiones productivas y en 2016, la demanda de las pymes y grandes compañías de nuevos préstamos se acerca progresivamente a los registros previos a la recesión.

La entidad añadió que otro de los datos “esperanzadores” que confirman el mantenimiento de la tendencia iniciada en 2015 en el ámbito económico y empresarial, es que, por primera vez desde 2008 y por segundo trimestre consecutivo, el saldo en activo fijo productivo de las pymes crece y continúa en positivo, lo que implica que “las nuevas formalizaciones en inversión crediticia productiva supera por fin a las amortizaciones”. La financiación para comercio exterior ha crecido un 9% hasta el cierre de septiembre y la entidad ha duplicado en sólo dos años su actividad de acompañamiento al sector exterior. - DNA