madrid - El ministro de Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, se mostró ayer convencido de que la Comisión Europea entiende que hay que flexibilizar el objetivo de déficit público: “Nadie puede gastar indefinidamente más de lo que ingresa (...) pero no es menos cierto que nos hemos pasado cuatro pueblos en el tema de la austeridad”.

El ministro en funciones defendió durante una entrevista en Antena 3 que la Eurozona tiene que analizar por qué crece menos que sus competidores y avisó de que la política monetaria no da más de sí, porque no se pueden bajar más los tipos.

“Es verdad que se puede seguir comprando deuda pública y sobre todo privada para favorecer las inversiones pero la política monetaria está agotada y hay que tirar de política fiscal. Austeridad sí, pero no matando la gallina de los huevos de oro”, dijo.

Margallo está convencido de que la Comisión Europea es consciente de esa situación y recalcó que España no es el único país que pidió una reflexión sobre qué hay que hacer para cumplir los objetivos de crecer y crear empleo y, algo que “empieza a ser vital en España, robustecer y aumentar las clases medias que son las que más han sufrido en la crisis y las que dan estabilidad al país”.

Margallo consideró que tras las elecciones del 26-J sólo serán posibles “dos sistemas planetarios”, un gobierno “constitucionalista” apoyado por PP, PSOE y Ciudadanos o uno “rupturista” cuyo eje sería Podemos.

Recalcó que el que España tenga un gobierno u otro dependerá del PSOE, que estará “en la frontera” y deberá decidir si quiere optar por un gobierno constitucionalista o por un bloque de izquierdas, “una especie de Cambiemos”.

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, aseguró que el reconocimiento de Margallo de que se han “pasado cuatro pueblos” son tan sólo un motivo más para apoyar el cambio de Gobierno y de políticas tras las próximas elecciones generales. Además, reafirmó su propuesta de derogar la reforma laboral impulsada por el PP, dado que se trata de una modificación normativa que “recorta” derechos laborales, así como el resto de medidas aprobadas por el Partido Popular que han restringido prestaciones sociales y que “amenazan” las libertades.

Por su parte, el portavoz parlamentario de Izquierda Unida-Unidad Popular, Alberto Garzón, agradeció la “sinceridad” de García-Margallo al admitir que el Gobierno se pasó “cuatro pueblos con el tema de la austeridad, pero le corrigió: “Eso no es pasarse cuatro pueblos, es un saqueo en toda regla”, dijo.

Garzón puso en valor esa “sinceridad” de Margallo porque, a su juicio, “que un ministro del PP sea por los menos capaz de reconocer que ha habido una agresión económica y política frente a la mayoría social es de agradecer”, pese la distancia ideológica que les separa. - DNA