BILBAO -Iberdrola ofrecerá a sus clientes un paquete integrado para la instalación de placas de energía solar para autoconsumo. La eléctrica vasca entra en el segmento del autoconsumo fotovoltaico con un producto dirigido a hogares unifamiliares, empresas y agricultura de regadío.

La compañía presentó ayer esta solución, denominada Smart Solar Iberdrola, en Bilbao en un acto al que asistieron unos 200 invitados, entre ellos clientes de Iberdrola, asociaciones empresariales, fabricantes de paneles solares, empresas de instalación y mantenimiento de paneles, aseguradoras y entidades financieras. El director Comercial, Aitor Moso, y la directora de Eficiencia y Servicios Energéticos de la compañía, Raquel Blanco, explicaron esta propuesta, con la que Iberdrola pretende potenciar el desarrollo de la energía solar fotovoltaica en el Estado.

En concreto, se ofrecerá un paquete integral que supone el diseño, montaje, y puesta en marcha de la instalación solar, en palabras de Raquel Blanco, diseñado como “un traje a medida” de cada cliente tras realizar un estudio “personalizado”.

También se incluye soluciones de financiación, asesoría y mantenimiento, además de posibilitar la supervisión de la planta a través de herramientas web y aplicaciones para conocer en el teléfono móvil “en tiempo real” la información sobre la producción de su instalación o la evolución de la energía consumida.

La solución “llave en mano” está dirigida a clientes domésticos que residan en viviendas unifamiliares, empresas y agricultores con terrenos de regadío. Todos ellos podrán generar y consumir su propia energía eléctrica, “optimizando el consumo y mejorando la eficiencia energética de su instalación”. La iniciativa se enmarca en el “compromiso histórico” de Iberdrola con “el desarrollo sostenible y el medioambiente” y, aunque sus ventajas dependerán de cada cliente, permitirá, en el caso de los hogares, “consumir un 20 o 30% de tu propia electricidad” si no se cuenta con acumulación y “más de un 70% si pones baterías” para almacenar la energía no consumida, explicó la responsable de Eficiencia y Servicios Energéticos.

La inversión Según precisó, también la inversión variará en función de las características de cada cliente, si bien, “por ejemplo, en una vivienda unifamiliar con unas placas de 3 kilovatios y unas baterías de unos 4 kilovatios/h, que puedan almacenare energía para medio día, sería unos 10.000 o 12.000 euros” que podría rentabilizarse en “del orden de siete o diez años”. La presentación de ayer se suma a el lanzamiento del pasado viernes de un nuevo producto comercial dirigido a las personas que ya están generando energía solar fotovoltaica en España.

La responsable de Eficiencia y Servicios Energéticos dijo que, con independencia cuál “sea el entorno regulatorio, hay caso para determinadas tipologías de clientes” como los agricultores que no tienen “suministro eléctrico cercano”. Añadió que cuando se apruebe el Real Decreto sobre autoconsumo se analizará cada caso.

“Que luego la regulación puede ser con más beneficios o no, fantástico. Pero en cualquier escenario regulatorio hay clientes que necesitan esto y a los que le es rentable”, matizó. Iberdrola ha contabilizado cerca de un millón de viviendas unifamiliares que podrían beneficiarse. - DNA