La economía española ha vuelto al crecimiento en 2014 tras cinco años de recesión y la recuperación de la demanda interna ha cobrado protagonismo en los tres últimos trimestres del año, lo que según el Gobierno garantiza el objetivo de que el PIB se eleve un 1,3% este ejercicio. No obstante, la elevada deuda pública, que ha vuelto a marcar un récord al situarse en el 97,1% del PIB en septiembre, y el compromiso de cumplir con el objetivo de déficit del 5,5% del PIB para este año, se han perfilado como los principales retos de España.
La ligera recuperación económica y su consolidación se ve amenazada por la ralentización de las economías de la Eurozona, ya que aunque Alemania ha logrado sortear la recesión con un pequeño avance del 0,1% en el tercer trimestre, el consumo interno en Francia y en Italia sigue estancado. Esta peor evolución de los principales socios europeos incide directamente sobre las exportaciones españolas, que en los últimos meses han visto como disminuía su avance, aunque el dato de septiembre es considerado por el Banco de España como esperanzador.
prudencia El propio gobernador, Luis María Linde, ha alertado de que España “no está exenta de riesgos” ante la falta de impulso de la zona euro y ha advertido de que el crecimiento económico puede ser muy bajo durante mucho tiempo”. Linde sigue apoyando la previsión de crecimiento del 2% del PIB que incluyen los Presupuestos Generales del Estado para 2015, aunque señala como principal dificultad la meta de déficit público para 2014.
De hecho, el Estado acumuló hasta octubre un déficit de 30.856 millones de euros, equivalente al 2,9% del PIB, mientras que las autonomías incrementaron su saldo negativo hasta septiembre un 24,63% interanual. Mientras tanto, la inflación se mantuvo en niveles negativos desde julio del pasado año y así cerró 2014, tras caer en noviembre el 0,4% interanual. El Ejecutivo ya advertió de que no habría subida de precios hasta principios de año, aunque descartaba el riesgo de deflación.
optimismo El ministro de Economía, Luis de Guindos, insistió en que los fundamentos de la economía española se han afianzado y en que el PIB resurgiría a cierre de este año tras caer el 1,2% en 2013. Aseguró que la reforma laboral, la fiscal y la financiera han dado un vuelco a la situación de España, que ha pasado de ser una “rémora” para la UE a tirar del carro y se muestra optimista sobre la evolución del mercado laboral, al avanzar que entre finales de 2013 y finales de 2015 se habrán creado 800.000 nuevos empleos, casi 180.000 más de lo que previsto en los presupuestos del próximo año.
Y es que en septiembre el Ejecutivo mejoró una décima la previsión de crecimiento para 2014, hasta el 1,3%, y en dos décimas la del 2015, hasta el 2%. Datos que van en línea con los del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los de la OCDE, que también han revisado al alza sus previsiones para España situándolas en un 1,3% en 2014 y en un 1,7% en 2015, mientras que la CE preveía un crecimiento del 1,2% para el pasado año y del 1,7% para el 2015.
progresión El PIB encadena cinco trimestres consecutivos de crecimiento y desde que aumentó en el tercer y cuarto trimestre de 2013 (el 0,1% y el 0,2%, respectivamente) ha seguido avanzando a un ritmo que alcanza el 0,5% intertrimestral entre abril y septiembre. El mejor comportamiento de la demanda nacional ha compensado la menor contribución al PIB del sector exterior, que se ha visto lastrado por el aumento del 71% del déficit comercial y que a cierre de año tendrá una contribución negativa del entorno del 0,1%.
Pero sin duda, el principal reto de la economía española es rebajar la deuda pública, que en el pasadoseptiembre se situó a tan sólo cinco décimas del límite del 97,6% marcado para todo el año.
Algunos organismos internacionales y el propio Banco de España tienen dudas sobre el cumplimiento de los objetivos de déficit en 2014 y 2015. La Comisión Europea (CE) ha dejado ver su preocupación por el efecto negativo que la reforma fiscal y las cuentas autonómicas pueden tener sobre la reducción del déficit, aunque el Gobierno descartó ajustes adicionales en 2015 para cumplir el compromiso de bajar al 4,2% del PIB.
Otros analistas españoles creen que los nuevos criterios para medir el PIB pueden suponer incluso un empujón para mejorar los objetivos de déficit. De hecho, según el nuevo cómputo, que incluye actividades como la prostitución, la droga, el contrabando de tabaco o el juego, y modificaciones en la contabilidad de la I+D+i, permitió que el déficit del conjunto de las administraciones públicas cerrara 2013 en el 6,33% del PIB frente al 6,62% previsto.
El nuevo cálculo ha subido el peso de la economía española en más de 26.000 millones de euros y la ha situado en 1,049 billones en 2013.
producto interior bruto. Para 2015, el Gobierno contempla en los Presupuestos Generales del Estado un crecimiento del PIB de 2% empujado sobre todo por el consumo interno, que subiría el 2,1%.
exportaciones. El Ejecutivo contempla que las exportaciones de bienes y servicios crezcan un 5,2%, frente al 3,6% que lo han hecho en 2014.22,9%
tasa de paro. La estimación oficial sobre la tasa del desempleo la sitúa en el 2,9%, dos puntos menos que el año que termina.17,757
millones de trabajadores. Los pronósticos para el número de empleados elevan la cifra desde los 17,409 millones de el 2004 a 17,757 millones, según la Encuesta de Población Activa (EPA).
deuda pública. Los expertos sostienen que la deuda pública continuará su escalada hasta situarse en el 102,6% del PIB el próximo año por encima de los augurios del Ejecutivo que prevé que aumente hasta el 100,3%, cifra que supone rebasar la emblemática barrera del billón, con B, de euros.