BILBAO - El BEC acoge esta semana, miércoles y jueves, la segunda edición del InvEXPOrt, un salón orientado a facilitar a las empresas en los procesos de internacionalización. Acudirán como expositores patronales, empresas con vocación exportadora de diversos sectores, escuelas de negocios, entidades financieras, organismos públicos y agencias de desarrollo de inversiones de países como Marruecos o Perú, entre otros. Agentes implicados de una forma u otra en el desarrollo de proyectos empresariales en el exterior.
La Agencia de Desarrollo Económico, Spri, aprovechará la cita para reunir a su red internacional de consultores para que las empresas interesadas en salir fuera conozcan de primera mano la realidad de los países a los que quieren llevar sus productos o instalar oficinas comerciales o fábricas.
Desde que empezó la crisis, Spri ha colaborado con la puesta en marcha de 2.714 proyectos que han permitido lanzarse al exterior a empresas vascas. Es una dinámica que ha ido a más los últimos años, solo entre enero y agosto se han activado 265 procesos de internacionalización, pero el ritmo de este año supera al del 2013. En diciembre se estará cerca del récord, marcado en 2012 con 504 proyectos y en siete años, muy complejos por la recesión, se triplicará el volumen acumulado en el periodo 2001-2007.
La directora de Internacionalización de Spri, Miren Madinabeitia, explica a este diario la filosofía de una herramienta que está siendo clave para evitar el cierre de empresas. Muchas de ellas ni soñaban vender fuera antes de la tormenta que azota la economía desde 2008.
Una red de 70 países El mayor espacio expositivo del salón vasco de la internacionalización será el de Spri, que además es uno de los organizadores del evento. La agencia adscrita al Departamento de Promoción Económica y Competitividad desplazará al BEC a 30 consultores para orientar a las empresas vascas. Son profesionales que cubren un radio de acción de más de 70 países. Conocen la realidad de cada mercado, las oportunidades de negocio, los trámites a cumplimentar y, por tanto, son voces muy acreditadas.
Durante los dos días de la feria, atenderán todo tipo de cuestiones. Hay empresas que acudirán para saber si su producto tiene mercado fuera. Otras llegarán con una idea a desarrollar y con la intención de conocer qué camino debe seguir para abrirse paso fuera. Y también habrá consultas de empresas que ya están consolidadas en el exterior y ahora quieren diversificar, explica Miren Madinabeitia.
Básicamente, las compañías demandarán información sobre mercados concretos -las citas se conciertan con anterioridad con el responsable que cubre un área determinada- y en algunos casos se realizarán análisis más detallados de mercados, aranceles aduaneros y potencial de asistencia comercial.
Para los proyectos más maduros, la cita del BEC servirá de primer contacto y, posteriormente, los consultores de Spri se encargarán de preparar las agendas de reuniones en los países destino. Si la iniciativa cristaliza, la red exterior de la agencia empresarial realizará todos los análisis relacionados con la propia implantación -la búsqueda de terrenos o de naves- e incluso la búsqueda de socios locales o posibles acuerdos de joint venture. “Acompañamos a la empresas en todos los procesos de aproximación al mercado y en todas sus variantes”, subraya.
La mayoría de los empresarios tiene claro hacia qué zona geográfica quiere enfocar su negocio, pero habrá quien modifique el rumbo aconsejado por los asesores. En líneas generales, Madinabeitia detalla cuáles son los destinos con mayores expectativas. Sin olvidarse de Europa, un mercado doméstico de la empresa vasca aunque en horas bajas por el frenazo de Alemania y Europa, las compañías “están mirando más hacia los mercados de Latinoamérica”.
La agenda de los consultores de Spri está prácticamente cerrada. Entre los más demandados, hay mercados con altos ritmos de crecimiento y políticamente muy estables, como Colombia, Perú y Chile, un mercado más maduro. Mientras que hay otros como Estados Unidos, México -que también sigue siendo muy demandado- y China, que se mantiene de forma estable con una tendencia creciente, pero más moderada.
En el otro lado del mundo está Oriente Medio, muy solicitado en los últimos años, y algunos países africanos se perfilan como el futuro del desarrollo económico, por su potencial de consumo interno. Con todo, la economía no es inmune a cuestiones como la crisis del ébola o conflictos políticos que derivan casi siempre en guerras locales. Son cuestiones que generan inestabilidad y la seguridad jurídica es un aspecto que se tiene muy en cuenta a la hora de entrar en un mercado.