bruselas - Mariano Rajoy, se empeña en defender contra viento y marea sus recetas para impulsar la creación de empleo, pero ni en Bruselas ni en Frankfurt tienen nada claro que las medidas puestas en marcha sean la solución, especialmente la tarifa plana de 100 euros de cotización a la Seguridad Social para los nuevos contratos indefinidos aprobada a finales de febrero. Según advierten Comisión Europea y Banco Central Europeo, en el primer informe post rescate bancario publicado ayer, ni está claro cuántos nuevos empleos podría generar esta nueva medida, ni de qué tipo, ni si será "presupuestariamente neutra" como dice el Ejecutivo central.
Y es que, aunque admiten que la tarifa -aplicable a todos los nuevos empleos indefinidos creados entre el 25 de febrero y el 31 de diciembre de 2014- podría impulsar principalmente "la conversión de contratos temporales en permanentes", uno de los objetivos con los que fue creada, "su potencial para estimular la creación de empleo adicional es más incierto".
"La tarifa plana implica que cuanto mayor sea el salario, mayor será el ahorro para la empresa en sus contribuciones a la Seguridad Social y, en consecuencia, una pérdida de ingresos para el sistema", avisan los expertos alertando de que si no hay medidas compensatorias podría no ser "plenamente neutral" desde el punto de vista presupuestario. No es el único jarro de agua fría que le endosan Bruselas y Frankfurt al Ejecutivo español. Puede que el empleo haya iniciado una moderada expansión y que la tasa de paro haya caído levemente, pero sigue siendo "un nivel extremadamente elevado" y "el paro de larga duración y los desajustes en las cualificaciones complican el reto de reducirlo de forma sustancial a medio plazo", alertan. "España tendrá que continuar en la senda del ajuste económico durante bastante tiempo para compensar sus desequilibrios.- S.M.