La Eurozona respira desde ayer aliviada. Tras "intensas y complejas" deliberaciones, según admitió el presidente del Tribunal Constitucional federal alemán, Andreas Vosskuhle, la corte dio luz verde al pacto fiscal y al Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el nuevo fondo de rescate permanente al que podrán acudir los países en apuros cuando vean la sostenibilidad de sus finanzas públicas comprometida. Una vía libre sujeta a algunas condiciones pero clave para que la ratificación del nuevo cortafuegos europeo pueda entrar en vigor en breve. Gobiernos europeos y mercados acogieron con satisfacción el veredicto. La prima de riesgo española cerró en 402 puntos e incluso llegó bajar del umbral de los 400, un nivel que no registraba desde el mes de abril. Según la sentencia, la contribución de Berlín al nuevo instrumento podrá superar los 190.000 millones de euros ya pactados con el resto de socios europeos y ratificados en Alemania pero solo si antes lo aprueba el Bundestag, que deberá pronunciarse sobre cualquier modificación al alza de esta cifra. "Ninguna disposición del tratado debe ser interpretada de forma que se establezcan obligaciones de pago más elevadas para Alemania sin el acuerdo de los representantes alemanes", advirtió ayer Vosskuhle durante la lectura de las 85 páginas de sentencia.

Esto significa que el parlamento alemán seguirá siendo clave en la adopción de cualquier medida relativa al MEDE y que deberá pronunciarse previamente. Además, los jueces también exigen garantías de transparencia e información para que los diputados alemanes, tanto del Bundestag como del Bundesrat, que representa a los estados federados, tengan acceso a toda la información relativa a los rescates.

Entre los que mostraron ayer satisfacción por el resultado están la canciller Merkel. En su opinión, aunque la crisis está lejos de estar resuelta, el fallo demuestra la responsabilidad de su país con el euro. "Alemania ha vuelto a mandar una señal fuerte a Europa. Hoy es un buen día para Alemania y para Europa", valoró durante el debate presupuestario. La decisión significa que ya no hay obstáculos legales que impidan al presidente de Alemania, Joachim Gauck, estampar su firma en el nuevo cortafuegos y convertirse así en el último país de la Eurozona en hacerlo. El proceso de ratificación quedó bloqueado el 29 de junio debido a los recursos presentados, entre otros, por un diputado de la misma familia política que Angela Merkel, Peter Gauweiler, que ha desafiado prácticamente todas las decisiones relativas a los cortafuegos europeos así como el colectivo Más democracia.

El Eurogrupo confía ahora en solventar los últimos trámites en poco tiempo. De hecho, su presidente, Jean Claude Juncker, no ha perdido el tiempo y convocó ayer la primera reunión del consejo de gobierno para el 8 de octubre. Otros analistas como Guntram Wolff, del centro de estudios Bruegel, no son tan optimistas y opinan que los nuevos requisitos retrasarán la puesta en marcha del nuevo fondo de rescate que necesita ser ratificado por países que sumen el 90% del capital suscrito. Alemania dispone de un 27%, de ahí que su aval sea requisito imprescindible. Quienes ven con mejores ojos todo el proceso son los mercados que ayer respondieron en positivo. La prima de riesgo española cerró en los 403 puntos aunque llegó a situarse, por primera vez desde abril, por debajo del umbral de los 400 nada más conocerse el fallo. El Ibex cerraba con una subida del 0,78% y alcanzaba los 7.992,1 puntos, rozando el umbral de los 8.000.