Madrid. La Bolsa española se dio ayer su enésimo batacazo tras ceder el 2,55% y registrar un nuevo mínimo anual (6.831,9 puntos) perjudicada por la caída de la actividad industrial en Europa, la débil creación de empleo en los Estados Unidos y el retroceso de la banca.
El índice de referencia de la bolsa española, el Ibex 35, se dejó 179,1 puntos, la octava mayor caída del año, hasta 6.831,9 puntos, con lo que continúa en niveles similares a los registrados en marzo de 2009 y tras haber llegado a tocar mínimos de junio de 2003. El descenso anual se eleva ya al 20,25%. En Europa, Milán bajó el 2,6%; Londres, el 0,93%; Fráncfort, el 0,75%, y el índice Euro Stoxx 50, el 0,71%, en tanto que París subió el 0,42%.
La Bolsa española empezó el día con ganancias superiores al 1% que le permitían rebasar el nivel de 7.100 puntos impulsada por los máximos registrados en la víspera por Wall Street, que se situaba en precios de marzo de 2008 después de rozar los 13.300 puntos con un alza del 0,5%.
El descenso en abril de la actividad industrial en la zona euro, que se situaba en niveles de junio de 2009, así como en Alemania, Francia, Italia y España, cambiaba la marcha de la Bolsa, que bajaba de golpe cerca de 200 puntos y paraba en 6.900 puntos.
Esperando al Ecofin A la contracción de la actividad manufacturera europea había que sumar otras noticias negativas, como la menor concesión de préstamos bancarios en China o la escasa disposición de Alemania a establecer los nuevos requisitos de capital para la banca que debatía el Ecofin (ministros de Economía de la UE). Los datos de paro conocidos ayer tampoco ayudaban a la evolución bursátil, pues en Alemania crecía en abril en 19.000 personas, mientras que en la zona euro aumentaba una décima en marzo, hasta el 10,9%.
El encarecimiento del interés de las letras a un año en Portugal contribuyó a que la bolsa española perdiera la cota de 6.900 puntos.
La caída de la Bolsa española se acentuaba después de la publicación de los datos de empleo del sector privado estadounidense, que indicaron la creación de 119.000 nuevos puestos de trabajo en abril. El mercado nacional marcaba el mínimo anual durante la sesión en 6.776,5 puntos.
Las pérdidas de Wall Street en la apertura mantuvieron a la bolsa nacional por debajo de 6.800 puntos, aunque la moderación de su caída, a pesar del descenso del 1,5% de los pedidos a fábrica en los Estados Unidos en marzo, sirvió para que el mercado español se recuperara.
A pesar del descenso de la banca, cuya solvencia fue apoyada por el ministro de Economía y de Competitividad, Luis de Guindos, no descartó que puedan crear sociedades intermedias para aislar activos inmobiliarios, aunque no aclaró si recibirán ayudas públicas, la bolsa superó los 6.800 puntos al final de la sesión.
Todos los grandes valores bajaron: Repsol, el 4,15%, la segunda mayor caída del Ibex; BBVA, el 3,33%; Banco Santander, el 3,31%; Telefónica, el 3,13%, e Iberdrola, el 2,96%. Bankia encabezó las pérdidas del Ibex al bajar el 5,13%.