madrid. El Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid ordenó ayer el embargo a José María Ruiz-Mateos y a tres de sus hijos varones por valor de 681,02 millones de euros para cubrir el déficit patrimonial de Clesa, ya que les considera culpables de la situación de insolvencia de la empresa láctea.
Así lo indicó el magistrado Francisco Javier Vaquer, que refleja que esta medida se ha adoptado sin audiencia de los demandados, ya que se considera que de lo contrario sería infructuosa la medida cautelar por que podría realizarse la distracción u ocultación de los bienes". "Con sus actuaciones y omisiones permitieron la explotación de una actividad empresarial incapaz de generar beneficio bastante para atender a sus gastos de explotación", precisó.
Este es el segundo embargo que los tribunales dictan contra la familia Ruiz-Mateos, pues el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Granada, acordó el septiembre de 2011 un embargo de 618,26 millones.