Madrid. CCOO y UGT advirtieron ayer al Gobierno de que no se sienten "ni vinculados ni comprometidos" con su propuesta de reforma de la negociación colectiva, y le aseguraron que "se equivoca" si busca "un ejercicio de equilibrio y funambulismo" porque corre el peligro de no contentar a ninguna de las partes. Con esta declaración el Ejecutivo se queda solo en su apoyo a la nueva norma y está obligado a buscar apoyos difíciles en el Congreso para poder sacarla adelante.
"Este no es el proyecto que corresponde al principio de acuerdo que se alcanzó con la patronal", aseguró el secretario de acción sindical de UGT, Toni Ferrer, junto al de CCOO, Ramón Górriz, tras mantener una reunión de dos horas con el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez. "Ésta es una reforma que el Gobierno se plantea de manera unilateral y no tiene como motivo un plazo concreto, sino dar una señal a los mercados financieros", con la que se están "equivocando", dijo. Górriz advirtió de que "no es debilitando los convenios" cómo se genera empleo, sino que se debe hacer "desde el sistema financiero, facilitando créditos a las empresas y a las familias y con una política fiscal distinta a la actual".
Las bazas Así las cosas, el Gobierno, ante su soledad, se mostró ayer abierto a cambiar la reforma mediante la introducción de enmiendas de los partidos políticos durante su tramitación en el Congreso de los Diputados. De hecho, el Ejecutivo ya ha empezado a cambiarla tras incluir en el texto, una rebaja de los 20 meses previstos en el borrador de la reforma, a un periodo de entre 12 y 18 meses del plazo que tienen patronal y sindicatos para negociar un nuevo convenio. Pasado ese período, las partes tendrían que someterse a un arbitraje. Este cambio está más próximo al planteamiento de la patronal, según explicó ayer Valeriano Gómez
El otro punto negociable es la flexibilidad interna de las empresas, donde la reforma introduce elementos que, según dijo el ministro, ningún gobierno había abordado: el descuelgue de los pactos salariales, las modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo y la prevalencia del convenio de empresa.