bilbao. Caja Laboral prevé que en 2011 se produzca "un impulso" en el crecimiento económico en el País Vasco, que sus previsiones cifran en un 1,36% del PIB, aunque no será suficiente para disminuir significativamente la tasa de paro, que se situará ese año en un 9,4%, según sus estimaciones.
Responsables de la entidad presentaron ayer en Bilbao el informe de coyuntura que elabora el departamento de Estudios de la caja sobre la economía vasca y sus perspectivas para el próximo año, en el que se recoge que Euskadi cerrará 2010 con un crecimiento del PIB estimado de un 0,24% (similar al 0,2% augurado por el Gobierno Vasco), tras el decrecimiento de un 3,3% registrado en 2009. La tasa de desempleo estimada para el presente ejercicio será de un 10%, porcentaje próximo al de los últimos trimestres.
El director de Estudios de Caja Laboral, Joseba Madariaga, puntualizó que dichas estimaciones no contemplan las "muchas incertidumbres" que todavía se ciernen sobre la economía, pero indicó que el escenario es "de transición" hacia tasas de crecimiento que permitirían disminuir la tasa de paro, lo que "quizá" podría ocurrir en 2012. A su juicio, la crisis "en términos de producto ha acabado, pero en términos de comportamiento de mercado laboral -matizó- todavía falta más de un año para ir rebajando las tasas de paro".
Según el análisis de la entidad, en los próximos meses es previsible "cierto tirón" del consumo y de la demanda interna. También se espera que la demanda externa aporte algo al crecimiento económico, que se prevé esté liderado por la industria y los servicios, desde el punto de vista sectorial.