madrid. El déficit del Estado hasta noviembre se multiplicó por cinco en relación con el mismo periodo del año anterior al pasar de 13.967 millones a 71.524 millones de euros, el 6,79% del PIB, debido, según el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, a la crisis y a las medidas tomadas para combatirla.

Los gastos hasta noviembre ascendieron a 168.718 millones de euros (el 21,5% más que en el mismo periodo de 2008) y los ingresos fueron de 97.194 millones (el 22,2% menos).

En términos de caja -que computa los ingresos y pagos cuando se efectúan y no cuando se comprometen, como hace la contabilidad nacional-, el Estado registró hasta noviembre un déficit de 68.508 millones, frente al saldo negativo de 11.038 millones del mismo periodo del año anterior.

Ocaña subrayó que estos datos hay que "contextualizarlos" y tener en cuenta que en diciembre hay una cantidad de pagos significativa.

El secretario de Estado incidió en que es imprescindible el proceso de consolidación fiscal para el próximo año, algo para lo que también pidió el esfuerzo de las comunidades autónomas y entidades locales, sobre las que dijo que el Gobierno será "absolutamente escrupuloso" para que cumplan con el objetivo de déficit.

Para estas administraciones, Ocaña señaló que es muy importante que hagan un esfuerzo de contención del gasto en el capítulo de retribuciones, ya que si no será "difícil imaginar" cómo se va a conseguir la reducción del déficit.

En cuanto a los ingresos no financieros, que aportan datos del conjunto de las Administraciones Públicas antes de descontar la participación de las administraciones territoriales, alcanzaron 150.754 millones, el 13,9% menos que en 2008.

Los impuestos directos se elevaron a 82.938 millones, el 13,7% menos, con una disminución del 10,9% en el IRPF, por la agilización de las devoluiones, y del 23,2% en el Impuesto sobre Sociedades, por la segunda fase de la reforma fiscal y por los menores beneficios de las empresas.

Los ingresos por impuestos indirectos alcanzaron 52.579 millones, el 21,3% menos, con un descenso de la recaudación del IVA del 29,7%, hasta 32.299 millones, debido a los mayores aplazamientos contabilizados y a la ampliación del derecho de devolución mensual.

Por su parte, los ingresos por impuestos especiales se elevaron a 17.758 millones, el 15% menos, con un descenso del 11,4% en el Impuesto sobre el Alcohol y las bebidas derivadas y del 3,3% en el Impuesto sobre Hidrocarburos.

Asimismo, los pagos no financieros ascendieron a 163.600 millones, el 24,7% más y las transferencias corrientes aumentaron el 28,5%, con 95.657 millones de euros, entre las que destacan las transferencias al Servicio Público de Empleo Estatal de 17.767 millones y el aumento del 109% de las transferencias de capital debido a los pagos del Fondo Estatal de Inversión Local.

Además, a finales de noviembre el Estado tuvo una necesidad de endeudaiento de 108.842 millones, frente a la necesidad de endeudamiento de 36.203 millones del mismo periodo del año anterior.