El Gaztedi estuvo cerca de lograr la gesta en su visita al Gernika, pero acabó derrotado por tres puntos (26-23) ante un rival confeccionado para rubricar una plaza en la categoría de División de Honor.

La escuadra vitoriana no tembló ante un adversario que cuenta con una de las melés más potentes del grupo y superó con creces el objetivo de competir de tú a tú ante el Gernika. El equipo gasteiztarra, que atravesaba un estado de forma pletórico tras derrotar al Oviedo a domicilio, no pudo asaltar la segunda plaza en la clasificación pero se mantiene en la zona noble de su grupo y cumplió con varias semanas de antelación su objetivo de la permanencia.

Tal y como señala el técnico Miguel Beltrán de Otalora, el Gaztedi ofreció dos versiones opuestas en su examen ante el Gernika y tuvo que remar a contracorriente después de protagonizar un flojo inicio. “Han sido dos partes diferentes, en la primera ellos nos han superado y hemos estado todo el rato defendiendo en nuestro campo, pero en la segunda le hemos metido más ritmo y juego, llegándonos a poner por delante en el marcador y con posibilidades de ganar”, señaló el entrenador del equipo vitoriano, quien se mostró orgulloso por la reacción de sus pupilos y por poder “acercarse a este estilo de equipos”.

Pese a la derrota, el Gaztedi hizo realidad matemáticamente su objetivo principal de la temporada, que no es otro que mantener la categoría. Ahora, los vitorianos afrontan un desenlace de la segunda vuelta con holgura clasificatoria y tratarán de fortalecer las bases de su proyecto ofreciendo oportunidades a los menos habituales. “En estas últimas jornadas nos queda que los jugadores se diviertan un poco más, que no se vean limitados por el marcador y dar más minutos a los jugadores que no han podido tener tanto protagonismo”, concluyó Miguel Beltrán de Otalora.