La selección española masculina de balonmano disputará mañana viernes las semifinales del Campeonato de Europa que se está celebrando en Hungría y Eslovaquia, una ronda en la que estará por sexta vez consecutiva y en la que intentará, además de conquistar su tercer oro seguido, asegurarse su decimoséptima medalla en una gran cita internacional.

El balonmano nacional vive un gran a momento a nivel de selecciones y pese a iniciar una renovación obligada en sus filas y a bajas importantes como las de los hermanos Dujshebaev, los Hispanos vuelven a estar en la pelea por un podio del que no se bajan a nivel europeo desde el año 2014.

España busca emular a la gran Suecia de finales del siglo XX y principios del XXI, que fue capaz de encadenar tres títulos continentales sin oposición. En 2020 ya igualó algo que hasta ahora sólo había hecho los suecos, alcanzar tres finales seguidas, y en caso de lograr un nuevo pase el próximo viernes, será el primer combinado nacional en jugar cuatro en la historia de forma consecutiva.

La selección española afrontará este viernes su décima semifinal en un Europeo en busca de mantener su buena racha, ya que ha superado las tres últimas y también lo hizo en 1996, 1998 y 2006. En total, de las nueve anteriores presencias en la penúltima ronda, sólo en 2012 no consiguió medalla. Ocho preseas que la convierten en la que más ha conquistado a nivel continental.

En este sentido, la de mañana será la semifinal número 21 en grandes citas que jugará la selección que, hasta el momento, tiene un balance de ocho ganadas, seis en Europeos y dos en Mundiales (2005 y 2013), y doce perdidas, mientras que de las anteriores 20, sólo en cuatro, la mencionada de 2012 y las de los Campeonatos del Mundo de 2015, 2003 y 1999, no se logró metal.

Por ello, en el caso de mantener su buena racha, los Hispanos encadenarían cuatro grandes torneos con medalla ya que al oro europeo de 2020, se unieron el año pasado los bronces en el Mundial de Egipto y en los Juegos Olímpicos de Tokio, y sumarían la decimoséptima de su historial repartidas hasta el momento en cuatro oros, cuatro platas y ocho bronces.

España se encontrará en las semifinales con Dinamarca, la vigente campeona mundial, que ocupó la segunda plaza del Grupo I tras caer ayer por 29-30 ante Francia, que finalmente quedó primera y se enfrentará a Suecia. Cruces que nadie hubiera podido imaginar tras unos primeros 45 minutos de juego en los que Francia pareció abocada a quedarse fuera del torneo, dada la superioridad danesa.

Los nórdicos entraron en los últimos quince minutos con una ventaja de cinco goles (26-21) que pareció condenar definitivamente a su rival, que además se quedó en el tramo final sin su mejor defensor, el pivote Ludovic Fabregas, tras ver tres exclusiones.

Pero con todo perdido surgió la mejor versión de los Experts. Un hasta entonces desaparecido Vincent Gerad comenzó a aportar con dos paradas que permitieron a Francia igualar la contienda (28-28) a poco más de tres minutos para el final. Un tiempo en el que ni el ataque con siete hombres que propuso Dinamarca pudo impedir la remontada de los galos que, con un gol de Mem, dieron, por fin, la vuelta al tanteador (29-30) a un minuto y medio para el final.