- Cada cierto tiempo, las traineras más humildes tienen su día. Las condiciones climatológicas, capaces de hacer saltar por los aires todos los pronósticos, crean oportunidades inesperadas y la opción a la bandera surge para embarcaciones que acostumbran a pelear por otros objetivos. Ayer en Zierbena se creó el escenario perfecto para dar la sorpresa, para que los participantes en la primera tanda pudieran soñar con una victoria en la máxima categoría. Las circunstancias apuntaron a ello y Ondarroa lo aprovechó a la perfección. La Antiguako Ama realizó una muy buena regata en la primera tanda. La dominó con mucha solvencia y logró un tiempo, a priori, destinado para rascar un buen puñado de puntos y huir de los problemas. Pero el viento apareció como el mejor aliado. Las ráfagas se incrementaron, el campo de regatas aumentó su dificultad y el registro ondarrutarra no pudo ser superado, lo que significó una primera e inesperada bandera para Ondarroa.

Las ráfagas de viento fueron un impulso para la Antiguako Ama, pero no fue el único factor diferencial en Zierbena. Los ondarrutarras hicieron muy buen su trabajo y se ganaron con creces la oportunidad. El resultado del sábado obligó a Ondarroa a remar en la primera tanda, pero desde el inicio dejó claro que no es una embarcación destinada a estar todo el año ahí situada. Su lugar está más arriba. La cuadrilla preparada por Iñaki Errasti impuso su ritmo y Zarautz, Tirán y Ares no le hicieron sombra. En un campo de regatas diferentes a los demás, en el que su forma de rombo lleva a no conocer la situación exacta de las traineras, Ondarroa no dejó dudas. Vivió la regata como una contrarreloj y logró la victoria con solvencia.

Hecho el trabajo, a Ondarroa le tocó esperar y al resto de las tripulaciones sufrir en un campo de regatas que se complicó por momentos. Las ráfagas de viento llegaron a rondar los veinte kilómetros por hora y el mar se endureció significativamente. Los botes de la segunda tanda fueron el ejemplo de ello y ahí bogó Urdaibai. Los bermeotarras fueron de más a menos durante el transcurso de la regata y finalmente fueron superados por Cabo y Donostiarra, cayendo hasta el octavo puesto final y sufriendo dos golpes consecutivos en sus aspiraciones a la tanda de honor.

La moral de los ondarrutarras creció con los resultados de la segunda tanda y con el inicio de la tercera la opción de victoria empezó a ser muy real. Zierbena y Orio quedaron descartados de la lucha y salieron muy tocados en la general. Mientras, Santurtzi y Hondarribia pelearon en cabeza. Las dos traineras bogaron a la par en los dos primeros largos y en el tercero la Sotera dio un paso adelante. Pero los tiempos dejaron claro que la lucha no fue por la bandera. Fue por sobrevivir a la enésima jornada de locura de esta competición y ahí los santurtziarras demostraron, una vez más, su capacidad de escapismo ante las situaciones extremas. Hicieron su trabajo, acabaron terceros y endosaron otro golpe más a sus rivales. Sin ganar ninguna jornada, su liderato cada vez está más fortalecido.

La situación no solo benefició a Ondarroa. Lekittarra también se marchó de Zierbena con un botín que no entraba en sus planes y que le sirve para dar un importante salto en la general. Los entrenados por Osertz Alday quedaron segundos en la tanda, a siete segundos de la AntiguakoAma. Ese resultado ya fue una victoria para ellos debido a que dejaron por detrás a Tirán y Zarautz, sus dos rivales directos. Sin embargo, con el paso de la regata también vieron como nadie más era capaz de superarles. Finalmente acabaron segundos y cosecharon un bonito colchón de cara a las siguientes jornada. La fiesta estaba en Ondarroa, pero en Lekeitio también marcharon con una sonrisa bien grande a casa.

Satisfacción. La victoria en Zierbena fue un estallido de emociones para los integrantes de Ondarroa. “Estoy muy emocionado. En este momento me acuerdo de las personas que me han dado esta oportunidad, de la familia y de todos los remeros que han estado”, afirmó Iñaki Errasti. El entrenador reconoció que en la segunda tanda, cuando el tiempo empeoró, “vimos que podía estar ahí la bandera”. Fue la primera victoria en la Eusko Label Liga para el club ondarrutarra y también para varios de sus remeros, como es el caso de Josu Elu: “Estamos muy contentos. Tanto para el club como para mí es la primera bandera en la ACT. La regata ha sido dura y nos ha costado dominar la tanda. Al final hemos conseguido ganarla y luego la climatología nos ha favorecido”.