- Dice no haberse quitado un peso de encima, pero lo cierto es que Jokin Altuna atendió a los medios mucho más liviano que en la pasada final del Manomanista. Y con la txapela sobre la cabeza. “Este partido ha tenido otra cara sí, pero no venía pensando en tomar ninguna revancha porque sabía que si jugaba pensando en eso, no me iba a ir bien”, explicó el delantero de Aspe. Es decir, la derrota de hace un mes ante su mismo rival de ayer, Erik Jaka, sí que le pasó factura; pero Altuna III no llegó al frontón Bizkaia con la intención de resarcirse, ni de recuperar sensaciones; porque eso ya lo había conseguido en el duelo de cuartos de final ante Elezkano: “Esa semana fue muy complicada porque me costó mucho cambiar el chip; pero contra Danel lo conseguí, me encontré bien y ahí supe que podía darle la vuelta a lo ocurrido en el Manomanista. Al final en la carrera de un deportista hay días malos y llenos de obstáculos”.

De hecho, ayer Altuna ganó y convenció. “Me siento supercampeón, me siento mejor que nunca; pero no solo porque he ganado; sino porque he disfrutado muchísimo en el frontón”, reconoció tras la final. El amezketarra exhibió un juego muy sobrio y se mostró muy ágil de piernas, algo que él mismo achaca a la confianza con la que terminó el Cuatro y Medio: “Llegaba al ancho y volvía rápido porque me he sentido fuerte. Estaba centrado en el momento, estaba centrado en cada tanto porque al final desde pequeños luchamos por llegar hasta aquí. Este día es un regalo en mi carrera profesional y lo he aprovechado, como he dicho, no solo por ganar sino también por cómo lo he disfrutado”. Y eso que el partido no comenzó bien para el campeón, que empezó con tres tantos abajo por culpa de una ráfaga acertada de Jaka. Pero entonces, Altuna tiró de mentalidad positiva. De optimismo. Para lograr revertir la situación del inicio del encuentro. “En ese momento solo pensaba en el siguiente tanto porque es cierto que siempre te vienen cosas a la cabeza, pero tienes que aprender a quitarte esos pensamientos negativos y solo pensar en el siguiente tanto. Hoy me ha parecido algo muy sencillo porque he estado muy cómodo, pero no siempre es fácil por eso estoy muy contento”, concluyó el delantero de Aspe.

Sin tiempo para digerir la victoria, Jokin Altuna acudirá mañana a la presentación de la nueva edición del Parejas; por lo que el amezketarra reconoció que la celebración de esta txapela, lograda en un frontón Bizkaia vacío y en plena pandemia, será mucho más comedida de lo habitual: “Son fechas especiales y me toca celebrarlo con la familia en casa, que es lo más importante en estos momentos. Además, es una forma inmejorable de terminar este mal año, esta mala racha que llevamos como sociedad por el covid-19; así que me siento un privilegiado por poder venir al frontón a hacer lo que más me gusta”.