- Desde que se fundó el Kutxabank Araski, Madelén Urieta ha liderado siempre el banquillo excepto en una campaña y ha ido creciendo a la par de la entidad, en la que ejerce también como directora deportiva. La de Amurrio ha logrado estabilizar a su equipo en la máxima categoría del baloncesto español y su trabajo ha sido reconocido por sus compañeros con el premio a la mejor entrenadora de la Liga Femenina Endesa el año pasado y con su convocatoria para formar parte del cuerpo técnico de la selección española femenina de baloncesto. Este viernes, a las 20.45 horas en Cáceres, dará comienzo su décima temporada al frente del equipo, un año que poco tendrá que ver con los anteriores y que estará marcado por la situación de emergencia sanitaria causada por el covid-19.
¿Cómo está viviendo el baloncesto de la nueva normalidad?
-Está siendo complicado. El inicio ha tenido que ser muy lento y progresivo, mucho más de lo que nos hubiera gustado y más que en una temporada normal. Las jugadoras llevan seis meses paradas y, aunque han trabajado muy bien en sus casas y en gimnasios, no han tenido contacto con el balón y se nota. Las dos primeras semanas fueron totalmente de adaptación, en los primeros partidos hubo muchas dudas y solamente hemos completado unos pocos entrenamientos colectivos.
¿Está suponiendo un reto para usted entrenar en esta situación?
-Sí, la verdad es que está tocando reinventarse e innovar. Las canteranas también están siendo muy importantes en el día a día, ayudando a que los entrenamientos se desarrollen con normalidad falte quien falte. Las jugadoras están sabiendo adaptarse a este nuevo panorama y eso es fundamental para conseguir cierta estabilidad entre tanta incertidumbre.
¿Cómo cree que está gestionando todo la Federación Española de Baloncesto?
-Sí que es verdad que ha costado que se publicara el protocolo. Entiendo que al final lo que buscaban era un consenso con las autoridades de cada comunidad autónoma, el CSD y las federaciones, algo que es muy complicado. Ahora parece que ya tenemos un protocolo definitivo y pinta bien. Creo que la propuesta es buena y protege tanto a las jugadoras como a los cuerpos técnicos. Los equipos van a poder competir en igualdad de condiciones.
¿En qué momento llega el Kutxabank Araski al arranque liguero?
-Tenemos un margen de mejora bestial y eso es lo más importante. El equipo está lejos de su mejor nivel, lo que es normal a estas alturas de la temporada tras solo un mes de trabajo. Aun así, creo que vamos en buena dirección. Estamos en el camino del trabajo, del compromiso, de la humildad, del sacrificio... Esos son los valores que necesitamos para que cuando el viento no sople a favor seamos fuertes. Creo que la plantilla está preparada para el partido de mañana y ojalá eso se vea traducido en un buen resultado, que las jugadoras lo necesitan. Hemos perdido los tres amistosos que hemos jugado, pero somos un equipo ambicioso y entrenamos para ganar.
¿Le preocupan los resultados de los partidos de pretemporada?
-Para nada. El equipo ha ido creciendo en cada encuentro. Nos hemos enfrentado a dos equipos muy fuertes, que van a dar guerra este año. Sabemos que la liga es muy complicada, todos los equipos son capaces de ganar a cualquiera y eso va a hacer que la competición sea muy bonita. No tenemos que centrarnos en el resultado de los amistosos, sino en la mejoría que ha notado el equipo.
Han tenido que suspender tres amistosos por posibles contagios dentro de las plantillas, ¿hasta qué punto les puede afectar?
-Eso sí que me preocupa más. Tres amistosos en una pretemporada tan corta son muchos y son estos partidos los que hacen crecer al equipo. Tendremos que adquirir ese rodaje durante la liga. En cualquier caso, es una realidad que estamos viviendo todos los conjuntos. De hecho, el Al-Qázeres, nuestro rival en la primera jornada, solo ha podido disputar un amistoso, por lo que en ese duelo en concreto hemos jugado dos partidos más que ellas.
En el último amistoso contra Movistar Estudiantes, cuando cambió el quinteto en el tercer cuarto y sentó a Abalde y a Cruz el equipo funcionó mejor sin fichajes. ¿Aún no se han adaptado?
-Al final hay mucha diferencia de haber estado un año trabajando con el equipo a ser una recién llegada. Quise probar ese quinteto para ver si un equipo del año pasado seguía funcionando igual que hace un año y funcionó. Los fichajes se están adaptando fenomenal, pero hay que tener en cuenta que llegan a un baloncesto diferente, sistemas nuevos, compañeras nuevas... Ellas necesitan un poco más de tiempo, pero estoy segura de que van a adaptarse perfectamente al equipo.
Anna Cruz ha sido el fichaje con más cartel y llega con un palmarés impresionante, pero ha estado discreta en los amistosos.
-Es una jugadora que nunca ha sido de meter muchos puntos. Lo ha ganado todo, pero desde el silencio, y eso es lo que está haciendo también aquí. Sus prestaciones han ido mejorando con el paso de los días y cada vez se siente más segura y tranquila con su rodilla, no hay que olvidar que viene de una lesión de menisco por la que ha estado casi un año parada. Estoy segura de que un día hará clic, se olvidará de su lesión y volverá a ser la misma.
¿Le gusta más la plantilla de este año que la del anterior?
-Yo siempre voy a muerte con la plantilla que tenga, no pienso en si es peor o mejor que la del curso pasado. Cada año mi equipo es el mejor del mundo y voy a intentar que las jugadoras crezcan y toquen su techo, que sientan que ha merecido la pena, que han aprendido, han progresado y han disfrutado de la temporada.
Se marchan piezas importantes como Van den Adel, Carrera y Barbee. ¿Se van a notar sus bajas?
-Seguro. Carrera era una jugadora que nos aportaba mucha presencia, Barbee siempre he dicho que era una asesina silenciosa, aportaba en todas las facetas del juego. El de este año es un equipo diferente, es verdad que se va a echar de menos a jugadoras como Nat(Van den Adel), que estuvo mucho tiempo con nosotras y se ganó nuestro cariño, pero ahora solo pensamos en lo que tenemos, las piezas nuevas pueden hacerlo muy bien.
¿Cómo ve al resto de equipos de la Liga Femenina Endesa?
-Va a ser una liga muy dura. Todos los equipos están haciendo buenas pretemporadas y todos tienen referentes que son capaces de desestabilizar los partidos. Va a ser una temporada muy abierta en la que cualquier equipo puede dar la sorpresa. No hay posiciones asignadas de antemano, se va a tener que ganar todo en la pista.
¿Cuáles serán los rivales del Kutxabank Araski?
-Es difícil saberlo. El Perfumerías Avenida, el Girona y el Valencia Basket están un escalón por encima del resto, pero puede haber equipos que les planten cara e incluso les ganen. Luego están el Gernika, el IDK, el Lugo, el Estudiantes, el Zaragoza que ha hecho una muy buena plantilla... Va a estar todo muy ajustado, tanto por arriba como por abajo.
Con esta van a ser ya diez temporadas entrenando a este equipo, ¿qué es lo que le motiva a seguir?
-Lo primero es que amo el baloncesto. Lo segundo es que creo que al Kutxabank Araski todavía le queda mucho por crecer y a mí mucho por aprender de la mano del club y de las jugadoras que tenemos este año. Es un reto continuo, no hay desafío más bonito que seguir creciendo y consolidando el proyecto.
¿Qué es lo que ve cuando echa la mirada atrás?
-Evolución. Somos un ejemplo de hormiguitas, de ir poco a poco trabajando con un grupo y una directiva muy unidos. Hemos puesto una chincheta en el mapa del baloncesto femenino y eso es motivo de orgullo para el club y la ciudad.
Aunque en el baloncesto femenino cada vez hay más entrenadoras, en el masculino es algo muy difícil de ver. ¿Por qué?
-Ahora mismo en la ACB solo existe el caso de Anna Montañana como asistente del Montakit Fuenlabrada. Creo que hacen falta oportunidades y mujeres que realmente se atrevan a afrontar ese reto. Cuando aparezcan referentes femeninos y lo hagan bien, entonces se abrirá la puerta a otras entrenadoras.
¿Usted estaría dispuesta a aceptar un desafío como ese si se presenta en el futuro?
-A mí me encantan los retos. Si surge cualquier propuesta interesante y que realmente me motive voy a ir a muerte a por ella. ¿Por qué no? Ojalá algún día se presente la oportunidad de formar parte de un banquillo de la ACB.
Con la nueva temporada a punto de empezar, ¿qué le diría a todos esos aficionados araskizales que están dudando si abonarse o no al equipo en un año con tanta incertidumbre?
-Sé que la situación es complicada, a todos nos está afectando de una manera o de otra lo que está pasando, pero creo que tenemos que ser positivos y atrevernos a hacer la vida más normal posible. El baloncesto que van a hacer estas chicas va a ser un espectáculo bonito para poder desconectar de lo que ocurre fuera.
¿Qué van a ver en la pista?
-Esfuerzo, trabajo y pasión. Eso es lo que vamos a exigir en cada partido independientemente del resultado. Este equipo va a competir siempre hasta el final.
"Nunca pienso en si la plantilla es mejor o peor que la anterior, siempre voy a muerte con el equipo"
"Con la pandemia está tocando reinventarse, la preparación está siendo más lenta de lo que nos gustaría"
"Va a ser una liga muy dura en la que cualquier equipo puede dar la sorpresa, no hay puestos predefinidos"
"Faltan oportunidades en la ACB para las entrenadoras y mujeres que realmente se atrevan a aceptar el reto"