Real Madrid83

Joventut86

REAL MADRID Laprovittola (7), Deck (14), Carroll (15), Tavares (-), Randolph (13) -cinco inicial-, Causeur (11), Rudy, Reyes (7), Llull (7) y Mickey (9).

JOVENTUT Dimitrijevic (7), López-Aróstegui (6), Prepelic (22), Kanter (12), Harangody (5) -cinco inicial-, Wroten (13), Morgan (8), Omic (8), Ventura (3) y Zagars (2).

Parciales 17-10; 25-24; 28-27; 13-25.

Árbitros Perea, Torres y González.

Pabellón WiZink Center.

madrid - El Real Madrid acabó perdiendo un partido que dominó durante 36 minutos ante un Joventut que supo esperar su momento para imponerse en los últimos cuatro minutos de partido por 83-86. Klemen Prepelic con un triple empató a 81 para entrar en el último minuto del partido, y Tony Wroten con otro lanzamiento de tres adelantó a la Penya, 83-84. Otra canasta de Prepelic, tras un garrafal fallo defensivo local puso el 83-86 definitivo sin que los lanzamientos triples e Randolph o Laprovittola puedieran llevar al equipo a la prórroga.

Desangelado y con poco ritmo. Así comenzó el partido. Real Madrid y Joventut tardaron en tomarle el pulso al choque. Fallos en defensa incluidos del equipo verdinegro que permitieron a Anthony Randolph pensar y casi escribir un libro para anotar dos triples. Pablo Laso descartó para el partido a Facundo Campazzo, Trey Thompkins, Jeff Taylor y Salah Mejri, porque la acumulación de partidos -esta semana hay doble jornada de Euroliga de nuevo- atropella a los jugadores.

Otro dato a resaltar del primer acto, que finalizó con 17-10, fue el intento de reconciliación de Jaycee Carroll con la anotación. En el segundo, el Madrid jugó a trompicones. Cuando parecía que iba a romper el duelo, bajaba el ritmo y permitía que el Joventut se reenganchara en el marcador, momento en el que volvía a apretar un poco para distanciarse.

Un aliciente del partido era el examen que Klemen Prepelic, jugador cedido por el Madrid a la Penya, tenía que pasar. Lo hizo sin pena ni gloria en los primeros 20 minutos de juego. Carroll y el esloveno se emparejaron en el tercer cuarto. Catedrático y aspirante. Presente y, quizá, futuro. Mientras que Gabriel Deck aprovechó una buena racha en ataque para ir cimentando la ventaja madridista, 52-38 (m.23.30). No cambió el panorama y cuando parecía que el Madrid rompía definitivamente el partido, el Joventut, por méritos propios y deméritos ajenos, volvía a acercarse en el marcador aunque sin más, sin meter miedo, sin intentar acometer empresas mayores. Al final del tercer acto, 70-61.

El partido se embarulló en el inicio del cuarto definitivo con pérdidas, malas decisiones, fallos y faltas por parte de los dos equipos. El marcador se estrechó, 73-68 (m.34). Laso liberó del corsé de la dirección del juego a Llull, poniendo en pista y al mismo tiempo a Laprovittola, mientras que el Joventut, ahora sí, metió miedo al favorito y por segunda vez se puso por encima en el marcador, tras el 0-3 inicial, 75-76. El Madrid se dejó ir por su cansancio, por no romper el partido cuando pudo y por su cargado calendario. - Efe