Barcelona - El Fútbol Club Barcelona vive uno de sus peores momentos de la historia tras un verano lleno de inestabilidad y malestar entre la directiva y los jugadores, que no ven los refuerzos necesarios de Bartomeu para volver a competir al máximo nivel. La marcha de Neymar supuso un duro golpe para la entidad blaugrana, que no dudó en denunciar al brasileño por incumplimiento de contrato, donde se le reclama todo el dinero del primer pago que recibió de la prima de renovación (unos 30 millones de euros) en el anterior curso, además de una indemnización de 8,5 millones de euros. La sorpresa saltó cuando los jugadores posaron con el jugador del PSG en actitud amistosa nada más conocer la denuncia del club, en claro desafío a Bartomeu y los máximos dirigentes.
El jugador brasileño salió en una fotografía junto al argentino Lionel Messi y al uruguayo Luis Suárez, integrantes de uno de los tridentes más letales del fútbol mundial hasta la temporada pasada. Los tres disfrutaron junto en casa de Messi del día de asueto. A esta foto le siguieron otras en las que aparecían Dani Alves, también del PSG, y los barcelonistas Gerard Piqué, Douglas e Ivan Rakitic.
la diretiiva, molesta Las fotografías que Neymar Jr se tomó en Barcelona con excompañeros no cayeron muy bien en el club azulgrana, que sin embargo descarta que todo haya sido intencionado. A pesar de que las fotografías aparecen justo en el momento en el que se conoció la demanda millonaria del club contra el jugador, en el Barcelona se descarta que la coincidencia haya sido un hecho deliberado o planificado por parte de los futbolistas.
El mercado estival no comenzó de la mejor manera. La negativa de Verratti para fichar y la salida de Neymar solo fueron el principio de un verano que a cada día que pasa se está complicando más. La imposibilidad de contratar Coutinho y Dembelé para sustituir a Neymar está provocando el enfado de la parroquia culé, que clama la dimisión del presidente Bartomeu. Pero la situación aún puede empeorar. Leo Messi no ha firmado la renovación. Ante la ausencia de fichajes, el astro argentino parece que se está pensando renovar con el club de su vida. La no firma de Leo sería el golpe definitivo a esta junta directiva
Messi también estuvo en la comida de ayer en un restaurante de Gavà, que reunió a toda la plantilla. Inicialmente la comida interpretó en algunos sectores como un encuentro de los jugadores para debatir sobre la supuesta crisis entre futbolistas y club, pero la cita en Gavà Mar es un clásico de pretemporada y ya estaba planificada desde la semana pasada.
SERI, DESCARTADO El mediocentro del Niza Seri, fue descartado por razones técnicas, incrementando el malestar de los aficionados. Sin entrar en más detalle, el club se vuelve a apartar de este jugador, que ha estado en dos ocasiones cerca de la entidad azulgrana y especialmente en los últimos días.
Se esperaba que hoy o mañana el Barcelona cerrase el acuerdo, a falta de unos flecos que parecían ser los futbolistas que interesaban al Niza para que entrasen en la operación. El traspaso estaba apuntalado por 40 millones de euros, con acuerdo absoluto con el centrocampista del Niza, por un periodo de cuatro años. Después del encuentro del martes en el que el Niza volvió a perder por 2-0 contra el Nápoles (4-0 en el total), lo que le eliminó en la fase previa de la Liga de Campeones, el club se echó atrás en la contratación. - DNA/Efe
Coutinho. El jugador brasileño quiere ir al club catalán, pero el Liverpool tiene necesidad vender e intentarán retenerlo esta temporada. El Barcelona presentó ayer una oferta que llega a las 150 millones de euros, que será la última cifra a la que llegarán para intentar traer al medio centro brasileño.
Dembelé. El Borussia Dortmund ha puesto como fecha limite el domingo para que el Barça fiche al jugador, al que le ponen un precio de unos 150 millones. El Barcelona quiere rebajarlo a 100 más variables que lleguen a 130. El francés ya ha dejado clara su intención de jugar al lado de Messi.
Di María. Es la alternativa si Coutinho falla. Su precio rondaría los 40 millones, aunque el PSG pondrá dificultades para que salga, a pesar del overbooking que existe en la plantilla en la delantera del club parisino.