La temporada 2015-2016 llegó la semana pasada a su fin. Así que toca hacer balance. La primera valoración es que Baskonia ha hecho una temporada muy buena y meritoria, por encima de las expectactivas y objetivos marcados al comienzo de la temporada. Pero además de ello, jugando un gran baloncesto en muchos momentos de las distintas competiciones, con mención especial a la Euroliga. Tras varios años con trayectorias irregulares, el equipo se ha vuelto a colocar en lo más alto del baloncesto nacional y europeo, algo que es de agradecer. Y además nos ha vuelto a ilusionar a muchos aficionados, entre los cuales me incluyo. Entrando en impresiones más concretas, Baskonia volvió a disputar una Copa del Rey, llegando como todo el mundo sabe a disputar las semifinales tras un complicadísmo partido ante el anfitrión Obradoiro y teniendo opciones de haber llegado a la final. Una gran Copa con un gran ambiente por las calles de A Coruña, donde disfrutamos los numerosos aficionados allí desplazados. Sin embargo el punto álgido del equipo se produjo en Europa. El equipo cumplió los objetivos marcados inicialmente y se clasificó para el Top 16, quedando después encuadrado en el llamado “grupo de la muerte”. Y fue ahí donde Baskonia dio el mejor nivel, quedando en segunda posición, clasificándose para el Top 8 y con opciones muy serias también de haber conseguido la primera plaza, que finalmente fue para el todopoderoso CSKA ruso. La primera fase de la Euroliga resultó espectacular con victorias de muchísimo mérito y varios partidazos de los de quitarse el sombrero. Pero la gesta no acabó aquí y los de Peras arrasaron a su oponente en el decisivo cruce, el Panathinaikos griego, al que colocó un contundente 3-0 en la serie que daba el billete directo para Berlín y para disputar ocho años después una Final Four. Y aquí también el equipo no solo lo dio todo sino que a punto estuvo de plantarse en la gran final. Un partido ante Fenerbahce que también, contra pronóstico, lo tuvimos en la mano a falta de muy poco... ¡Qué pena!
En la liga domética Baskonia llegó hasta semifinales aunque no pudo con un Barcelona claramente superior que llegó a la serie además con muchas mas reservas en el depósito. Unas semifinales, por cierto, de las que faltábamos desde ya hace unos años. La serie será recordada para siempre por el canastón de Bourousis en el tercer partido en el Buesa, a falta de 9 décimas y cruzando el balón de lado a lado de la cancha. Lo reconozco, lo he visto 40 veces y no serán las últimas. ¡Increíble! El larguirucho de Tomic todavía está buscando el balón. Tremenda la canasta y espectacular y milimétrico el pase de Hanga casi desde el Bakh. Por todo ello, me parece oportuno felicitar a todo el equipo y cuerpo técnico. Este año he vuelto a disfrutar del Baskonia como hacía mucho. Ha sido una temporada con muy buenos momentos, con victorias muy meritorias ante grandes rivales. Hemos visto al Buesa Arena vibrar, volcarse con el equipo, hacer la ola, presionar como si no hubiera mañana... ¡Emocionarse, qué gozada...! Pero sobre todo hemos vuelto a ver nuestra gran seña de identidad, nuestro carácter, que ha hecho que el equipo no haya perdido la cara en malos momentos, que haya peleado hasta el final ganando partidos que estaban cuesta arriba o casi perdidos, que haya peleado y lo haya dado todo.
¿Y ahora, qué? Como en todo balance que se precie, también ha habido aspectos no tan buenos, es lógico. Hemos tenido lesiones diversas y de larga duración que han trastocado los planes y el rendimiento del equipo. Ha habido jugadores que por el motivo que sea no han acabado de entrar en el equipo. Pero, sin duda, el equipo ha llegado al final de temporada con la gasolina muy justa, con unas rotaciones reducidas y con algunos jugadores que bajaron notablemente sus prestaciones respecto a lo que venían ofreciendo en otros partidos. Y también ha habido debate con el juego de nuestros bases, ambos de un estilo alocado, capaces de reventar partidos a triples y anotar canastas inverosímiles, pero también de desesperar al personal con pases o balones perdidos. Así y todo, creo que Peras ha sabido sacar muchas cosas buenas de ellos y minimizar las malas. Me quedo con eso. ¿Y ahora qué? ¿Qué nos espera para la temporada que viene? Mira que los veranos en Vitoria siempre son entretenidos pero la pinta que tiene el de este año es tremenda. Esta misma semana, Josean Querejeta ofreció la rueda de prensa de balance de temporada. En ella comunicó oficialmente la marcha de Perasovic al Efes turco, salida que supondrá una compensación económica para el club. A Peras quiero darle las gracias desde aquí por el año que nos ha regalado a todos los aficionados. El queridisimo Velimir ha vivido tres épocas distintas entre nosotros: una como jugador y dos como entrenador, y en todas ellas ha dejado una huella imborrable y un recuerdo muy grato que perdurará para siempre. Hemos disfrutado con él y con sus logros al máximo y eso se lo debemos agradecer. Muchas gracias por todo Peras, suerte en tu nueva etapa, excepto si te toca jugar contra Baskonia. Como tú mismo dijiste en su día en la balconada: “Errekiskasko!”
Y como decía, vamos a prepararnos para un verano intenso. Dijo Josean el otro día que el presupuesto del Baskonia se incrementaba para la temporada siguiente en un 30-40 %, lo cual es una gran noticia. En primer lugar habrá que concretar el nuevo dueño del banquillo, que a día de hoy sigue vacante. En segundo lugar, concretar las piezas fundamentales, con la renovación de Bourousis como punto principal. Ojalá. Pero también el resto de la plantilla. Veremos también cómo queda esa opción de segundo equipo en LEB Oro. En mi opinión se trata de una buena baza y estratégicamente para el club algo imprescindible en esta nueva temporada. Hay que tener en cuenta que en cursos en los que se rondan los 70 partidos como en la pasada, el equipo ya llega justo. Para el año que viene se habla de unos 90, por lo tanto, la opción de ese segundo equipo se antoja necesaria. Pero además de ello, este verano habrá que concretar también apuntes económicos como el nuevo patrocinador, la entrada en vigor de las nuevas condiciones monetarias de Euroliga... Y para los VTV (vitorianos de toda la vida), a todo ello habrá que sumar al Deportivo Alavés con su ilusionante regreso a la Primera División que nos permitirá ver de nuevo a los grandes equipos y a los grandes jugadores de la Liga en Mendi. Estoy seguro que el Glorioso también irá paulatinamente subiendo prestaciones y consolidándose en la élite.
En definitiva, no sé qué tiene este maravilloso deporte del basket, y el Baskonia en particular, pero el caso es que siempre saca lo mejor de mí. Este año me lo he pasado genial viendo a mi equipo y escribiendo sobre él en el blog www.bajolacupula.com y espero que el que viene sea igual o mejor. Dejo para el final una mención a un partido muy especial, el de la celebración del 20º aniversario del título de la Recopa. Ver de nuevo en Vitoria a Rivas, Nicola, Millera y compañía fue sencillamente emocionante. Y encima se adornó con una tunda de 46 puntos a nuestros vecinos. Con mucho cariño y sin acritud, pero tenía que decirlo... ¡Feliz verano y aupa Baskonia!