Vitoria - Otra vez Alemania. El futuro olímpico del atleta internacional Iván Fernández vuelve a pasar por el trazado alemán, esta vez el de la ciudad de Berlín, elegida por el vitoriano y su entrenador, Martín Fiz, para disputar su segundo y definitivo maratón. Definitivo porque de la marca que consiga dependerá que el año que viene pueda participar en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el sueño que persigue desde hace años. El envite para la gesta tendrá lugar el próximo 27 de septiembre, domingo, y en el horizonte un objetivo capital, bajar de las 2 horas y 13 minutos. Para lograrlo, el atleta inició el primer día del pasado mes de julio un exigente plan de trabajo de once semanas donde ha corrido cerca de 2.000 kilómetros a razón de unos 175 kilómetros durante las primeras diez semanas. En este tiempo ha fijado entre nueve y diez sesiones en las que ha fortalecido músculos en el gimnasio y ha ganado fondo con rodajes medios y series de 3x4000, 4x3000 ó 25x400, además de tres o cuatro tiradas largas de entre 27 y 32 kilómetros. El resultado de estos 77 días de preparación -hasta la fecha- son un par de zapatillas desgastadas y un cuerpo más maduro y preparado para a cometer el gran reto. Por tanto, con el trabajo ya hecho y las piernas tonificadas a base de tantos entrenos que Iván ha distribuido por el parque del Prado, la zona de las universidades o los pueblos cercanos a Vitoria, todo apunta a que el objetivo está al alcance de la mano del vitoriano si se toman como referencia las marcas registradas en su plan de trabajo y, sobre todo, su debut en la prueba reina del atletismo, que tuvo como escenario otra capital alemana, Hamburgo, el pasado mes de abril. Entonces, Iván Fernández firmó un registro de 2 horas, 13 minutos y 43 segundos, cerrando su puesta de largo con muy buenas sensaciones pero sobre todo con la experiencia adquirida en una prueba de este nivel. “Ahora toca darlo todo. El maratón está en las piernas y lo tengo que sacar”, confiaba ayer el vitoriano. Río espera.
