madrid - A punto de estrenar el mes de agosto, la actividad política baja de velocidad. Ocurre cada año. Es el momento de que aparezcan las serpientes de verano. Temas a los que se aferran los políticos de guardia para tener su cuota de protagonismo. Ocurrió ayer con las valoraciones tras la decisión del Comité Antiviolencia de sancionar con diferentes cantidades económicas a Athletic, Barcelona, FEF y más de una decena de plataformas independentistas catalanas por la monumental pitada que se registró en la final de Copa. Entre los sancionados, solo el Barça emitió una valoración. En Ibaigane nadie habló, aunque es seguro que el conjunto rojiblanco habrá puesto ya el tema en manos de sus servicios jurídicos.

La institución presidida por Josep María Bartomeu, mediante un comunicado oficial, consideró como “injusta” e “inaceptable” la sanción al club azulgrana. Apelación ha propuesto una multa de 60.000 euros por “incumplimiento de las obligaciones exigibles al diseño y ejecución del dispositivo de seguridad y los controles de acceso”, y otra de 6.000 por “inacción y falta de colaboración mostrada” respecto de las convocatorias de diferentes actos dentro del estadio de carácter político: “El Barcelona recuerda que defenderá la libertad de expresión de sus socios y aficionados y que los hechos sucedidos en el Camp Nou fueron el reflejo de un sentimiento, ni organizado ni canalizado por la entidad, pero que el club respeta totalmente”.

Desde el ámbito político, fue la Generalitat de Catalunya la primera en rechazar las sanciones. A la espera de que el Gobierno vasco, por boca del lehendakari Iñigo Urkullu, haga una valoración al respecto al llegar a Estados Unidos, la vicepresidenta del Ejecutivo de Artur Mas consideró “inadmisible” que se impongan multas por los silbidos al himno español. “Exhibir banderas preconstitucionales es gratis y ejercer la libertad de expresión es castigado, no entiendo qué tipo de estado democrático es este”, destacó Neis Munté. Por su parte, el secretario del EBB, Koldo Mediavilla, lamentó que “ni la concordia entre aficiones, ni el magnífico espectáculo deportivo y social que supuso la final de Copa han merecido recompensa alguna”. “La virtud de la democracia está en que sus dirigentes deben saber aceptar el halago, el aplauso y el besamano, pero también las muestras de desaprobación”, subrayó Mediavilla.

Patxi López y la educación El secretario de Acción Política, Ciudadanía y Libertades del PSOE, Patxi López, instó a educar en el respeto de los símbolos: “No se trata de poner multas a los que pitan un himno, en todo caso se trata de educar en el respeto a símbolos que representan a mucha gente que no piensa como tú”. El grupo municipal de EH Bildu en Bilbao, por su parte, pidió que la Junta de Portavoces del Ayuntamiento consensúe una declaración institucional contra la sanción de “carácter político” impuesta” al Athletic.