Vitoria - No le ha durado mucho el paro futbolístico a Julio Bañuelos, el técnico burgalés que durante varias temporadas formó parte de la estructura del Deportivo Alavés. Unas veces como coordinador del fútbol base, otras como técnico del filial y las más como máximo responsable del primer equipo -bajo la alargada sombra de Piterman- o segundo de abordo de entrenadores como Salmerón o Iosu Uribe. Luego de vivir la campaña 2012/2013 su última experiencia en el banquillo del Olot gerundense en Tercera División, Bañuelos aceptó la semana pasada una oferta desde Chipre para las dos próximas temporadas. En concreto, el técnico burgalés, que ya consiguiera el ascenso a Segunda División B tanto con el Mirandés como con el Burgos, formará parte del nuevo proyecto del AEK Larnaka, uno de los cuadros punteros de la liga chipriota, como ayudante de Thomas Christiansen, el que fuera jugador del F.C. Barcelona, Racing de Santander y la selección española. Según reconoce el propio Bañuelos, su nueva aventura se centrará en ayudar al técnico hispano-danés y coordinar la cantera del AEK, labores que comenzará el próximo 7 de julio, día en que está previsto el inicio de la pretemporada. No obstante, el exalbiazul viajará unos días antes hasta la capital chipriota para concretar algunos temas personales.

Gran oportunidad Con una "tremenda ilusión" por bandera, Bañuelos, que después de su última experiencia en los banquillos residía en Cataluña, reconoce "la gran oportunidad que representa este proyecto para seguir progresando en mi carrera", una etapa, añade, donde espera también enriquecerse en lo personal, especialmente en lo relacionado con el idioma ya que el inglés será la única manera en que podrá comunicarse con sus jugadores. - A. Goñi