MÁLAGA. Triunfo inapelable del conjunto rojiblanco en un partido que controló en todo momento, aunque las ocasiones de auténtico peligro fueron escasas, en su mayoría para el equipo madrileño.
El técnico del Málaga, Bernd Schuster, sorprendió con una defensa de cinco jugadores, con la entrada del argentino Marcos Angeleri, que ocupó un puesto en el eje de la zaga junto con Weligton y Sergio Sánchez. Quería controlar a Villa y Diego Costa, además de las incursiones de Arda, Oliver y Koke.
Los primeros minutos fueron del equipo malagueño, con una ocasión de gol del delantero Samuel, tras una falta lanzada por la derecha, ante un rival que intentaba acoplarse y empezar a dominar ante un Málaga que no quería el balón y basaba su juego en las internadas por las bandas de los laterales Antunes y Gámez.
El conjunto rojiblanco inició el asedio a la portería de Willy Caballero y pudo adelantarse en una jugada personal del lateral derecho Juanfran, pero su disparo lo repelió el guardameta malaguista.
El equipo andaluz, nervioso, sin identidad, rifaba el balón en cada acción y era excesivamente respetuoso ante su rival.
El Málaga jugaba a trompicones, con acciones esporádicas como la protagonizada entre Gámez y Eliseu, con lanzamiento posterior del portugués, flojo, que paró Courtois.
Los locales intentaron reaccionar, pero el Atlético de Madrid creaba más peligro y Arda dispuso de una buena opción de gol que desbarató un atento Caballero.
El "Cholo" Simeone quería más y, viendo cómo estaba el encuentro, más a favor de su equipo que del Málaga, retiró a un centrocampista, Oliver, y puso en el campo a un delantero, el exmalaguista Adrián.
El partido transcurría sin ocasiones para ambos equipos, sin creatividad y con dominio rojiblanco.
Schuster puso en liza a su artillería con la salida del punta paraguayo Roque Santa Cruz y del centrocampista portugués Duda, por Juanmi y Eliseu. No le salió bien al entrenador malaguista porque cinco minutos después, en el 70, llegó el gol de Koke.
Fue una jugada por la izquierda de Diego Costa, con un pase a Adrián, que golpeó mal. El rechace le llegó en el área a Koke, que batió a Caballero con un tiro raso.
El Málaga se la jugó y fue a por el empate, más con el corazón que con la cabeza. Embotelló en su área al Atlético de Madrid, pero sin puntería.
Al final, triunfo del equipo rojiblanco, líder, por lo menos, hasta mañana, cuando juegue el Barcelona frente al Elche en el Camp Nou.