derio. Las pruebas más duras del ciclismo tienen 21 etapas y la Fundación Euskadi dio ayer la primera pedalada para completar su vigésimo primera etapa. Después de dos décadas escalando hasta lo más alto del ciclismo internacional, la entidad liderada por Miguel Madariaga ha tenido que superar graves obstáculos financieros para sacar adelante su equipo continental. Ayer, en el aula pedagógica de Derio, se presentó el nuevo proyecto, que finalmente mantiene el equipo Euskadi con ocho corredores que podrían ampliarse hasta diez si se amplía el presupuesto.

"Termina una maratón para los que hemos trabajado en esto, sobre todo en los últimos 20 días", explicaba ayer Madariaga; "la Fundación Euskadi es más que el equipo continental. Creo que se le ha dado demasiada importancia, pero ha sido porque de alguna forma Euskadi se quedaba huérfana". El vizcaino no estaba dispuesto a que la afición vasca se quedase sin un equipo de referencia en categoría profesional y presentó en sociedad a un bloque formado por Carlos Barbero, Jon Larrinaga, Haritz Orbe, Mikel Aristi, Illart Zuazubiskar y las incorporaciones de Víctor Etxeberria y Beñat Txoperena. Está pendiente la inscripción de un octavo ciclista, pero su nombre se conocerá el lunes: "Hay una terna de cuatro o cinco corredores que quieren venir pero están más o menos comprometidos con otros equipos. He hablado con ellos por teléfono y contestarán esta semana. Si ninguno viene, saldremos con siete. Ya vendrá más tarde algún otro".

En la Fundación Euskadi tienen fe en los corredores que ahora presentan, pero Madariaga tiene una pequeña espina por la forma en que algunos ciclistas han intentado solucionar la papeleta en un escenario complicado: "Estoy muy dolido con corredores que han dado la vuelta al mundo buscando algo, les han rechazado en todas partes y luego creen que tienen que seguir en la Fundación. La Fundación ha dado una oportunidad a todos los que no están. Nadie puede negar la oportunidad que ha tenido desde la Fundación Euskadi".

El plantel es escaso y Madariaga es consciente de que la temporada transcurriría con más garantías si contase con más ciclistas: "Necesitamos más corredores para un calendario digno, pero es para lo que tenemos ahora mismo, para ocho corredores. Estos días tengo reuniones con varias empresas y, si sale lo que me han dicho por teléfono, diría que se podría contar con 50.000 o 60.000 euros más. Con eso tendríamos que irnos ya a los diez corredores". Madariaga reconoce que le hubiera gustado llegar a este punto de otra manera, pero la realidad es que le faltan 100.000 euros para cubrir su presupuesto. Esto condiciona también el calendario que afrontará el equipo en 2014: "Vamos a seguir con calendario que hicimos el último año porque nos dio muy buenos resultados. Se puede tener más calendario, pero hay que pagar. Si no tenemos dinero, ¿con qué vamos a pagar? Si podemos tener más dinero, aumentaremos más carreras en Portugal y Francia, porque en España, desgraciadamente, no tenemos calendario. Andalucía no nos ha invitado hasta ahora, tiene que ser todo pagado por nosotros. Murcia, lo mismo. Estamos orgullosos de poder correr en las pruebas de casa, pero la Vuelta al País Vasco y Volta no nos pueden invitar porque son World Tour. En el fútbol seríamos un Segunda B y podríamos jugar la Copa y ganársela a los de Primera, pero no podemos jugar la Liga de Campeones".

sin director Aún está por decidir quién será el director de este equipo. Madariaga baraja "cuatro o cinco alternativas", pero aclara que todavía no se ha hablado con nadie: "El que cojamos tiene que entender lo que ha sido el proyecto anterior y poder poner en marcha el nuevo proyecto de la Fundación".

Además de este equipo continental, la Fundación Euskadi seguirá adelante con su escuela de BTT, que contará con más de 25 alumnos, la organización de eventos y encuentros deportivos, el trabajo del aula pedagógica por la que pasan más de 3.500 niños al año y, por supuesto, con el equipo amateur EDP sub'23, que tendrá en su plantilla a once corredores: Iván García Cortina, Julen Amarika, Pablo Comins, Javier Martín, Jon Irizarri, Josep Miralles, Jesús Alberto Ruiz, Óscar González, Eder Sáez de Ocariz, Ander Etxeberria-Zarraga y Xabier San Sebastián.

Estos serán los pilares de la Fundación en 2014. Miguel Madariaga no perdió la ocasión de manifestar que "en Euskadi se puede sacar el ciclismo adelante porque nadie tiene una afición como la nuestra, ni la ilusión por el ciclismo que hay en Euskadi. Pero tiene que ser hablando claro y teniendo ilusión. No hay que hacerlo por el dinero, sino por hacer algo por el ciclismo". En relación a las polémicas de los últimos meses, recalcó que está "abierto a cualquier proyecto que salga en Euskadi si algo necesitan de mí". Por último, quiso dejar claro cuál cree que es una carencia del ciclismo vasco: "Hace falta un líder, alguien que lidere un proyecto como en su día lo hizo la Fundación Euskadi. Un líder que tire con todo, que esté ducho y que tenga las cejas quemadas en la carretera y en el ciclismo. Eso es lo que pido: hace falta un líder".

Mientras aparece esa figura, ayer quiso dejar claro que está puliendo a la persona que puede ser su relevo dentro de la Fundación: Dorleta Zorrilla. "La estoy preparando para que sea mi relevo, pero no la vamos a dejar sola ni Iñaki Zarate ni yo", explicaba Madariaga, "es la mujer que dio el salto a director con el equipo Euskadi y lo que le espera ahora va a ser algo más fuerte. Va a tener el apoyo de todos y es un paso en su vida. Ha dado en la carretera todo lo que ha tenido y ha demostrado lo que vale en el ciclismo".

Dorleta Zorrilla ha sido una pieza importante en la Fundación en los últimos años y a sus 24 años cuenta con una amplia experiencia en el ciclismo. Dejó la bicicleta hace dos años, después de tres temporadas compitiendo en el Bizkaia-Durango. Nacida en Balmaseda, cuenta con el nivel 3 de director y ya tuvo la oportunidad de debutar en esa faceta en Burgos con el equipo Euskadi: "Fue una muy buena experiencia, muy diferente porque no había pasado nunca por amateur. Fue algo diferente y positivo. Resultó chocante hasta para los ciclistas". Dorleta reconoce que coger el testigo de Miguel Madariaga es un reto: "Relevar a Miguel Madariaga es algo muy importante y bastante difícil porque ha dejado mucha huella en el ciclismo. Lo que no se puede es ser Miguel Madariaga. Se puede aprender de las cosas que ha hecho, pero está claro que lo que ha hecho Miguel por el ciclismo es algo único. Tomar el relevo va a ser difícil pero no imposible, sobre todo teniéndoles a Iñaki y a él al lado".