Pamplona. Tiene 25 años y cuatro y medio de experiencia como profesional, pero Ibai Zabala cumplió el martes su sueño de jugar como titular en un torneo de Primera. Aimar Olaizola, su compañero, le facilitó mucho el trabajo y, tras un inicio titubeante, cumplió en su estreno. Pero esto no para y el próximo sábado le espera el segundo asalto. Ante Oinatz Bengoetxea y Mikel Beroiz. En el Labrit. Ibai Zabala se ha convertido, junto a José Javier Zabaleta, el zaguero de Irujo, en una de las dos caras nuevas de la presente edición.

¿Qué sensaciones le quedan de su debut como titular en el Campeonato de Parejas de la LEP.M ante los campeones, Titín III y Merino II?

Conseguimos llegar a 22, que es lo importante. Al principio estuve un poco tenso, más o menos hasta la mitad del partido, y luego ya me encontré más a gusto. Aimar me ayudó un montón, ganamos y terminé contento.

Por lo que dice y por lo que se vio, la actuación de Aimar le facilitó el estreno, ¿no?

Me intentó ayudar durante todo el partido porque, más que nervioso o presionado, me encontraba un poco agarrotado. Me ayudó mucho y, además, cuando tuvo la ocasión de terminar el tanto, lo acabó perfectamente. La verdad es que no se le puede pedir más.

¿Es un seguro de vida jugar junto a Olaizola II?

Por supuesto. Muchos me dicen que también es una responsabilidad jugar con él y pienso lo mismo. Pero no es solo una responsabilidad, también es una garantía porque sabes que va a dar su nivel y que te va a ayudar en todo lo que pueda.

Ya había jugado algún partido del Parejas como suplente, pero nunca como titular. ¿Cuál es la diferencia?

La situación cambia y más en el primer partido del campeonato, que siempre es el más difícil por la tensión que genera. Sin embargo, ganarlo da un plus de tranquilidad.

Ocurra lo que ocurra, para usted ya es un premio haber entrado en el campeonato.

Eso es. He estado trabajando duro para ganarme el puesto, pero la empresa también tiene que darme su confianza. En este caso me la ha dado, estoy contento y ahora, aparte de ese plus de motivación, también tengo un poco de responsabilidad por devolver a la empresa esa confianza que ha depositado en mí.

¿Por qué cree que ha sido uno de los cuatro zagueros que ha elegido Asegarce para el Parejas?

Creo que a la empresa le he transmitido tranquilidad y confianza en los últimos partidos y entrenamientos, en los que se me veía bien, con confianza, jugando a gusto con la derecha... Está claro que los últimos meses cuentan, pero hay más trabajo detrás. Lo que ocurre es que los resultados más recientes sí que se ven más al estar muy cerca el inicio del campeonato. Es ahí donde tienes que estar bien porque no te vale de nada estar bien en junio, aunque está claro que también cuenta la base de trabajo que acumulas.

¿Hasta qué punto confiaba en ganarse una plaza como titular?

No lo sé, pero tengo claro que no hay que obsesionarse ni ponerse unas expectativas demasiado grandes. La cuestión es trabajar y hacer las cosas bien. Si luego llegan los resultados, perfecto. Y si no llegan, hay que seguir trabajando igual. No es que me haya basado en nada ni que haya estado pensando en algo en concreto. He hecho las cosas como las estaba haciendo hasta ahora, pero esta vez me ha salido todo bien.