Francorchamps (Bélgica). El británico Jenson Button (McLaren) ganó ayer el Gran Premio de Bélgica, duodécima prueba del Mundial de Fórmula 1, que sigue liderando Fernando Alonso (Ferrari) a pesar de abandonar tras accidentarse en la primera curva, debido a un percance provocado por el francés Romain Grosjean (Lotus), que no correrá, por sanción, en Monza. Button, que el sábado había logrado en Spa-Francorchamps la octava pole de su carrera, la primera desde que es piloto de McLaren, dominó desde principio a fin una prueba que supuso su decimocuarta victoria desde que pilota en Fórmula 1, que consumó por delante del alemán Sebastian Vettel (Red Bull) y del finlandés Kimi Raikkonen (Lotus).

Un prueba en la que, sin restarle mérito alguno, se benefició del accidente provocado por Grosjean. El francés, que arrancaba desde la octava posición, se tocó con el inglés Lewis Hamilton (McLaren), que salió séptimo, junto a él, en la cuarta fila; y ambos se llevaron por delante a Alonso, quinto en parrilla, y al mexicano Sergio Pérez (Sauber), que empezaba cuarto.

Alonso tuvo la suerte de salir ileso de un accidente que hubiese podido tener consecuencias trágicas. Y cuyo visionado hiela la sangre. Así que, tras la carrera de ayer lo principal es celebrar que todo el mundo sigue en perfecto estado físico con miras a la siguiente jornada, el próximo domingo, en Monza, sede del Gran Premio de Italia.

Lo cual no es óbice para que Button, que el jueves había negado de plano la posibilidad de subordinarse a su compañero y compatriota Lewis Hamilton, festejase un fin de semana de ensueño, que remató saliendo desde la pole y circulando desde ahí primero hasta la meta.

Jenson arrancó bien tras la retirada del safety y lo más destacable desde entonces fue la remontada de Vettel, que salió décimo y ascendió al segundo puesto antes parar en la vuelta 22. En ese momento, a mitad de recorrido, Button lideraba con 8.5 segundos sobre un Kimi que si su coche hubiese respondido mejor, igual habría podido festejar ayer su quinta victoria en esta pista.

estrategia a una parada La estrategia de Button y Vettel -únicos que fueron a una parada- se confirmó como acertada. El alemán recuperó la segunda plaza, y por detrás se vieron bellos duelos, como el protagonizado por Raikkonen y Schumacher, que se intercambiaron adelantamientos hasta que Kimi dio un golpe de autoridad pegándole en la 32 y en Eau Rouge una buena pasada al Kaiser, el hombre récord de la Fórmula 1, que en Spa festejó 300 carreras en la categoría con una séptima plaza.

Después de ceder en el siguiente duelo por la cuarta posición ante el alemán Niko Huelkenberg (Force India), el brasileño Felipe Massa (Ferrari) y el australiano Mark Webber (Red Bull), que acabaron, por ese orden, en los puestos del cuarto al sexto.

Alonso, que involuntariamente puso el corazón en un puño a todos sus seguidores, sigue al frente del Mundial con los 164 puntos con los que se marchó de vacaciones, tras celebrar su trigésimo primer cumpleaños en Hungaroring, donde el pasado 29 de julio se corrió el Gran Premio de Hungría.