Vitoria. No hay nada peor para un deportista profesional que caer lesionado, pero ese inconveniente se agrava y alcanza límites de desesperación insospechados cuando el jugador que padece una dolencia se encuentra en un período de pruebas en el que trata de convencer a sus entrenadores de su valía para entrar a formar parte en un proyecto. Eso es precisamente lo que le ha pasado a Roberto Cano, el joven lateral izquierdo llegado al Deportivo Alavés procedente del filial del Racing de Santander, club en el que ha desarrollado toda su carrera, y que se encuentra de baja por culpa de una, ahora más que nunca, inoportuna lesión.

El lateral zurdo cántabro sufre una pequeña rotura de fibras en el cuádriceps de su pierna izquierda que ya le impidió tomar parte en la sesión de trabajo matinal de ayer en Mendizorroza y que le mantendrá de baja durante unos cuantos días. De momento, se ha optado por un tratamiento conservador para la recuperación, pero está claro que esta dolencia le complica el futuro al joven jugador cántabro.

Roberto Cano lleva en Vitoria desde el pasado martes y tenía por delante un período de dos semanas en los que tenía que convencer a los responsables deportivos alavesistas de su capacidad para sumarse al nuevo proyecto, en el que por su edad ocuparía además una ficha de sub'23. Ahora, esta lesión le impedirá ejercitarse durante unos cuantos días, así como tomar parte en los primeros amistosos, por lo que su incorporación definitiva puede ponerse cuesta arriba.

El cántabro fue el protagonista de las malas noticias en un entrenamiento a puerta cerrada en el que el primer equipo se enfrentó al filial en una prueba preparatoria. En dicha sesión sí que tomaron parte los dos jugadores que arrastraban molestias durante los últimos días, el defensa Agustín y el delantero Negredo. El equipo volverá al trabajo mañana en Ibaia.