REAL MADRID Iker Casillas, Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Marcelo; Lass, Xabi Alonso, Kaká (Di María, m.60), Özil (Coentrao, m.74), Cristiano Ronaldo (Altintop, m.77) e Higuaín.

BETIS Casto, Chica, Amaya, Dorado, Nacho; Iriney, Beñat (Momo, m.77), Salva Sevilla (Santa Cruz, m.58), Vadillo (Sergio, m.21), Jorge Molina y Rubén Castro.

Goles 1-0, m.46: Higuaín. 2-0, m.59: Kaká. 2-1, m.69: Jorge Molina. 3-1, m.70: Higuaín. 4-1, m.73: Higuaín.

Árbitro Delgado Ferreiro. Amonestó a Pepe por el Real Madrid, y a Beñat y Momo por el Real Betis.

Estadio Santiago Bernabéu, ante 83.000 espectadores.

Madrid. La brillantez en el remate de Gonzalo Higuaín, que firmó un nuevo hat trick, más un bello tanto de Kaká, castigaron la valentía del Real Betis de Pepe Mel, que pese a acabar goleado 4-1, dejó un buen regusto de fútbol. Higuaín vuelve a ganar la lucha de cada temporada. No hay campaña que empiece para el argentino como titular indiscutible. Sus goles del pasado quedan en el olvido y está exigido a mostrar más que los demás. Tres hat tricks en cuatro partidos, dos de blanco y uno con Argentina, le devuelven el protagonismo. A Pepe Mel no le importaba la grandeza del escenario. Su Real Betis tiene unas señas de identidad que no iba a cambiar. Su 4-3-3 era una invitación al Real Madrid a explotar su mejor arma, el contraataque, pero a la valentía verdiblanca le añadió máxima concentración para aguantar 46 minutos. El tiempo que tardó uno de sus futbolistas en cometer un error.

Fue de su portero. Y esos, no tienen solución. Álvaro Vadillo era el reflejo de su equipo. Descaro y valentía. A sus 17 años saltó a medirse a Marcelo y exigirle defensivamente. Encaró y generó dificultades. Sus minutos de buen fútbol acabaron en una camilla. A los 16 minutos un choque con Sergio Ramos le lesionó. Su sueño se desvanecía pero mostró que tiene un futuro esperándole. Había dejado detalles que justificaban el interés del Real Madrid en incorporarle a su cantera. En sus botas estuvo la primera ocasión. Iker Casillas sacó un disparo cruzado cuando no se cumplía un minuto. El Betis había salido a por su rival y le incomodaba en su propia casa. Provocó que el Madrid jugase a tirones, sin continuidad, buscando la espalda del rival con balones de Xabi Alonso.

El Betis no estaba incómodo en el campo e incluso perdonó. Pero el fútbol tiene sus cosas y más cuando te enfrentas a un grande. Son equipos infalibles ante un error. Nada más reiniciarse el partido, Casto dudó ante un pase picado a la carrera de Cristiano. Las décimas de segundo que por su cabeza pasó salir o quedarse bajó palos fueron una losa. El delantero portugués, generoso por segunda jornada consecutiva, regaló el tanto a Higuaín. Pisó el acelerador por momentos el equipo de Mourinho para sentenciar y pasar a pensar en Liga de Campeones. Casto le sacó una a Higuaín. Kaká perdonó en la culminación de una conexión brillante entre Alonso y el Pipita. Y Pepe rozó el gol con un testarazo tras un saque de esquina. No perdía el orden defensivo el Real Madrid, sujetado por la buena aportación de Sergio Ramos como central y el Bernabéu rugía en cada contragolpe. En plena locura Kaká cambió la nota de su partido. Un golpeo perfecto. Repleto de calidad con la rosca dada por el interior de su pie derecho, acabó en la escuadra de Casto. Ni cuando gana el Real Madrid rebaja el ritmo frenético. La entrada de Di María lo incrementó aún más. En ese fútbol de ida y vuelta, golpeó el Betis, cuando Jorge Molina aprovechó el único error de la zaga blanca para batir a placer a Casillas. Pero fue un espejismo. Segundos después Higuaín sentenciaba el duelo.