daegu. La maldición que parecía abatirse sobre los campeones olímpicos en los Mundiales de Daegu fue conjurada, al quinto día, por una estudiante de matemáticas rusa, Olga Kaniskina, que se coronó por tercera vez campeona mundial de 20 kilómetros marcha. Un peso mosca del atletismo (1,60 de estatura, 43 kilos de peso) acabó con la maldición del Daily Programme, el boletín oficial de los campeonatos, que desde el primer día de competición publicó en su portada la imagen de un campeón olímpico llamado a ser la figura del día entrante y que al final salió derrotado. Primero fue el australiano Steven Hooker, eliminado con tres nulos en la calificación de pértiga. Luego Usain Bolt, que perdió su cetro al ser descalificado por salida falsa en la final de 100 metros. A continuación Dayron Robles, descalificado por obstruir al chino Liu Xiang después de haber ganado la final de 110 metros vallas, y por último Yelena Isinbayeva, tan sólo sexta en la final de pértiga. Por su parte la española María Vasco llegó en decimotercera posición sufriendo mucho aunque con fuerza para el año que viene porque seguirá igual de motivada en sus quintos juegos olímpicos.
Kaniskina ha roto el gran maleficio al conquistar su tercer título de la marcha femenina, el noveno de Rusia en trece ediciones de los campeonatos. La primera mitad de los Mundiales ha constatado la llegada de una nueva generación de atletas llamada a borrar del mapa, o a descabalgar del primer puesto, a nombres consolidados. No sólo Yohan Blake, que se limitó a recoger la corona de 100 metros que arrojó su compañero de entrenamientos Usain Bolt con su injustificable precipitación en la salida, sino otros nombres hasta este año desconocidos, como Kirani James, un granadense de 18 años que ha batido al mismísimo LaShawn Merritt en los 400 metros.
El keniano David Rudisha, de 22 años, autor de dos récords mundiales de 800 el pasado año (el último, 1:41.01), confirmó que está para quedarse; en 10.000 el etíope Ibrahim Jeilan, de la misma edad, ha heredado el título de Kenenisa Bekele, y en 110 m. vallas el estadounidense Jason Richardson ha batido a los tres grandes, aprovechando la descalificación de Dayron Robles. De 22 años es también el nuevo campeón mundial de pértiga, el polaco Pawel Wojciechowski.