londres. La primera victoria de Novak Djokovic sobre Rafael Nadal en una final de Grand Slam, el domingo en la Catedral de Wimbledon, abre "quizá" una nueva era en el tenis, según reconoció el español cuando vio escapar su tercera corona del All England Club. Mientras trata de convencer a sus seguidores de que "estas cosas pasan", Nadal tiene claro que no fue ayer, sino en enero pasado, cuando Djokovic cambió el curso de los últimos siete años y empezó a hacer historia.
El serbio, convertido desde ayer a sus 24 años y 45 días en número uno del mundo, consiguió su tercer Grand Slam después del Open de Australia de este año y de 2008. Aunque su reinado acaba de iniciarse, estaba aunciado desde principios de año.
En 2011 Djokovic no ha hecho más que sumar victorias y títulos, cinco de ellos ante Nadal. El serbio había ganado todos sus partidos disputados este año (43) hasta que Roger Federer se le cruzó en semifinales de Roland Garros y truncó su impresionante racha.
Sin haber participado en ningún torneo de hierba previo a Wimbledon para aclimatarse a esa superficie, Djokovic se presentó en Londres para volver a sumar victorias y ya presenta cincuenta este año. Todo ello lo ha ido elevando en el ránking hasta desbancar a Nadal del número uno. Djokovic termina con siete años de dominio de Federer y Nadal. Ningún otro tenista se había instalado hasta ayer en el podio mundial desde que el 2 de febrero de 2004 el suizo desplazó a Andy Roddick.
Novak Djokovic demostró que también puede derrotar a Nadal un un partido disputado al mejor de cinco mangas. Las anteriores victorias en finales sobre el mallorquín se habían producido en los Master 1 000 de Indian Wells, Miami, Roma y Madrid, torneos que se resuelven en tres sets.
Rafa Nadal tendrá que convivir ahora con un Djokovic que ha llegado para quedarse y un Murray que, desde el cuarto puesto en el ranking, aspira a terminar con el maleficio británico. A ello se suma la resurrección del argentino Juan Martín Del Potro, que se perdió casi toda la anterior temporada por una lesión en la muñeca derecha después de haber ganado ya un Grand Slam. Además está la revelación del año en Wimbledon, el australiano Bernard Tomic, que a sus 18 años sólo cedió ante el campeón Djokovic. El rey del tenis mundial.