Montecarlo. El alemán Sebastian Vettel (Red Bull) acabó por enésima vez con las ilusiones del español Fernando Alonso y de Ferrari de partir desde la primera fila y mañana volverá a ocupar la posición de privilegio en la formación de salida de un Gran Premio, esta vez el de Mónaco. El piloto astuariano acabó cuarto al termino de una jornada muy accidentada y en la que el mexicano Sergio Pérez (Sauber) se llevó la peor parte, ya que terminó en el hospital, aunque sin lesiones graves como se temió en un principio.
En los entrenamientos libres de la mañana el alemán Nico Rosberg (Mercedes) perdió el control del coche en el bache que hay a la salida del túnel, donde empieza la frenada, y, tras golpear el lado derecho de los raíles de protección, tuvo la fortuna de evitar las protecciones que separan la escapatoria de la pista en la variante de entrada al puerto. Por la tarde, a falta de dos minutos y medio, Sergio Pérez perdió también el control del coche en el mismo punto. Se golpeó también con el lado derecho en los raíles de seguridad, pero no tuvo tanta suerte como Rosberg y se estrelló lateralmente contra las protecciones. La sesión de clasificación fue inmediatamente detenida mientras las asistencias sacaban al piloto de entre los restos del coche y era trasladado, consciente, al hospital Princesa Gracia de Mónaco para ser sometido a un profundo reconocimiento. Vettel, por su parte, no había aparecido prácticamente durante todo el fin de semana, Fernando Alonso había sido el más rápido en la jornada del sábado y en la última sesión libre de la mañana.
Ni siquiera en las dos primeras eliminatorias de la sesión de clasificción Vettel ocupó posiciones punteras, pero en la tercera y definitiva logró dar una vuelta perfecta, justo antes del accidente de Pérez, y marcó un tiempo de 1:13.556 que nadie podía creer y, menos, capaz de superar.
mala suerte de alguersuari Fernando Alonso salió para hacer un último intento, pero como la mayoría de los pilotos renunció a ella porque ya el primer parcial indicaba que no podían mejorar. Hoy, desde la cuarta posición, Fernando Alonso tendrá que repetir una salida perfecta como la que hizo el pasado fin de semana en Barcelona, para ganar alguna posición y poder terminar en el podio.
Jaime Alguersuari (Toro Rosso) por la mañana había conseguido la octava posición en los entrenamientos por delante de su compañero de equipo el suizo Sebastian Buemi, pero en la sesión de clasificación fue molestado en su vuelta rápida por el japonés Kamui Kobayashi (Sauber), que estaba prácticamente detenido a la salida de la curva de La Rascasse. Lo embistió por detrás y tendrá que partir desde la vigésima posición.
El día tampoco fue bueno para la escudería Hispania. Por la mañana Vitantonio Liuzzi se golpeaba en la curva de Santa Devota y obligaba por segunda vez a detener los entrenamientos, tras el accidente de Rosberg, al quedar el coche detenido en medio de la subida de la avenida Ostende, seriamente dañado. El indio Narain Karthikeyan tampoco pudo salir a la sesión de clasificción por un problema en la suspensión, pero ambos han sido autorizados a tomar parte hoy (14.00 horas) en la carrera por los comisarios del Gran Premio de Mónaco.