Vitoria. Juan Martínez de Irujo confirmó ayer su presencia en el choque que el próximo sábado le enfrenta a Aimar Olaizola en el frontón Bizkaia de Bilbao, un compromiso enmarcado dentro de los cuartos de final del Manomanista de la LEP.M. El delantero de Ibero, cuatro veces campeón del torneo y vencedor de las dos últimas ediciones, tomó la decisión después de completar ayer un exigente entrenamiento en el escenario donde hará su debut en la competición. Irujo se ejercitó durante aproximadamente una hora en compañía de su compañero de empresa y gran revelación del campeonato, el chantreano Mikel Idoate, que el pasado sábado consiguió un billete para las semifinales, ronda en la que Xala será su rival.
Irujo tenía dudas y no las despejó completamente hasta ayer. Había anunciado en la presentación del torneo, hace ya cuatro semanas, que su mano izquierda no estaba en condiciones de afrontar el torneo por culpa de una fibrosis, dolencia similar a la que sufrió hace tres años en la mano derecha y que le obligó a pasar por el quirófano. "He tenido la suerte de poder recuperarme para el partido", señaló el delantero de Ibero tras el entrenamiento que completó ayer en Bilbao, a lo que añadió que, "si tomo la decisión de jugar, es porque me veo en condiciones de salir a la cancha y con opciones de ganar; si no, me quedaría en casa".
No obstante, Irujo matizó que hasta ayer no vio clara su participación en el Manomanista, a pesar de haber mantenido durante estos días un alto grado de optimismo. "Hace 20 días era siniestro total, no sabía que iba a llegar al partido ni por el forro. Pero probando tacos y su colocación, al final he dado con la solución", que ayer disputó un exigente partido de entrenamiento contra Mikel Idoate en el que, según el propio pelotari, "he forzado bastante más que el viernes, que solo vine a estar en la cancha y tomar la distancia al frontón. Sin embargo, la semana pasada no forcé la mano y hoy (por ayer) sí lo he hecho como si fuera a jugar un partido de verdad".
El de ayer fue el tercer entrenamiento específico de Irujo, que no se viste de blanco desde que el pasado 2 de abril cayera eliminado en las semifinales del Campeonato de Parejas de la LEP.M, sin duda, la mayor preocupación del delantero de Ibero. "Ahora estoy en mi mejor momento de forma porque he estado corriendo y haciendo gimnasio, pero donde uno se prepara realmente es andando en la cancha. Desplazándome del cuatro al siete, yendo a por la dejada, corriendo hasta el nueve... Y eso es lo que me falta, ritmo de partido".
Consciente de que defiende el título del Manomanista, competición que ha dominado en sus dos últimas ediciones, Irujo no olvida que "llevo ya casi seis semanas sin jugar, aunque espero no acusar la falta de ritmo para poder ganar el sábado a Aimar". Respecto a la dolencia que sufre en su zurda, el navarro explicó que, "más que curar, he tenido que encontrar una solución. Pedro García (su masajista) me dio un taco y he podido entrenar. Hemos cambiado el material, es diferente, y dándole vueltas entre todos hemos encontrado la solución al problema". Una solución que le permitirá defender su corona, aunque para empezar el sábado se encontrará con un rival de cuidado, Aimar Olaizola.