vitoria. Yao Ming parece abocado a abandonar la práctica del baloncesto profesional mucho antes de lo que desearía. Así se lo está pidiendo su cuerpo, que ha vuelto a romperse y apenas le ha permitido jugar en las dos últimas temporadas. El pívot chino de los Houston Rockets, que no juega desde el pasado 10 de noviembre, estará de baja por tiempo indefinido debido a una fractura de tobillo por estrés que le ha sido detectada en una resonancia magnética efectuada en la ciudad texana.
El pívot de Rockets, siete veces All Star, ya se perdió toda la temporada pasada debido a una fractura en su pie izquierdo que le obligó a pasar por el quirófano. Este curso, el asiático ha retornado a las canchas, pero solo ha podido participar en cinco de los encuentros que ha disputado su equipo debido otra lesión, en concreto a una contusión ósea que se produjo en su tobillo izquierdo, que finalmente ha resultado ser una fractura por estrés en el maléolo.
El equipo texano ha emitido un comunicado para explicar que, por el momento, no existe un calendario previsto para la reaparición del techo de la NBA con sus 231 centímetros. En la temporada 2008-09 y con Ming en plena forma, los Rockets pusieron contra las cuerdas a Los Angeles Lakers en las semifinales de Conferencia (4-3). El curso pasado, ya sin el asiático, Houston ni siquiera se metió en los play offs, una mala tendencia que se mantiene este año, ya que es undécimo en el Oeste con una marca de diez victorias y quince derrotas. A pesar del excepcional rendimiento que está ofreciendo el exbaskonista Luis Scola, el equipo texano echa de menos a Ming.