Artium, que hoy recibirá a Esther Ferrer para cerrar la reubicación en el exterior del museo de Números primos, presenta desde esta semana las obras de los artistas José Ramón Ais y Alberto Peral en el marco del programa Plazaratu que propone la transformación del espacio público del centro. Se trata de dos piezas que forman parte de los fondos de la institución: por un lado, El ladrón de miel (2022), de Ais; y por otro la instalación Time (2006), de Peral, recientemente donada por el artista.

El ladrón de miel de José Ramón Ais está integrada por una alineación de árboles que atraviesan el espacio del museo desde la entrada principal hasta la plaza interna. La pieza forma parte de la serie Arbolado para calles, imperios y paraísos, que el artista laudioarra inició durante su estancia con una beca en la Academia de Roma, un conjunto de prototipos de alineaciones arbóreas que crean un diálogo entre los árboles y el contexto urbano.

Según Ais, “El ladrón de miel traslada el programa conceptual de un jardín clásico basado en relatos mitológicos a una alineación arbórea urbana”. En este caso, el título hace referencia a los versos bucólicos de Teócrito en los que Eros es picado por las abejas mientras intenta robar su miel.

Imagen de las dos obras ya instaladas.  | FOTOS: CEDIDAS

Imagen de las dos obras ya instaladas. | FOTOS: CEDIDAS

Está formada por especies melíferas –fresno, ciprés, tilo, higuera, naranjo y manzano–, que trabajan en simbiosis con las abejas. “Por sus múltiples usos, estos árboles han sido fundamentales en la evolución de las civilizaciones hasta llegar a las ciudades contemporáneas. La alineación es un artefacto de seducción en el que el aroma de la floración apela a la ciudad como organismo”.

Por otro lado, Time de Alberto Peral es una instalación de casi tres metros de altura de la que el artista ha dicho que “su proporción hace verla como un gran árbol que se abre hacia arriba o como un reloj de arena de grandes proporciones… Es voluptuosa y frágil, estilizada, simétrica, una gran peana que evoca y prepara el significado de lo que sostiene, una metáfora del tiempo”. La obra ha participado en exposiciones anteriores.