- El escenario del Urban Rock Concept vuelve a citarse este fin de semana con el público, eso sí, no como estaba previsto en un principio. Esta noche será el turno de Killus y Redención, mientras que mañana Tytan, Kev Riddles Baphomet y Streamer no acudirán al final a la capital alavesa.
La comitiva británica tenía que haber salido ayer de su país. Sin embargo, en los test previos realizados una de las personas que viajaban “ha dado positivo por covid; su estado de salud por el momento no reviste gravedad, por lo que nos sentimos aliviados, pero por desgracia ninguno de los miembros de Tytan y Kev Riddles Baphomet puede viajar a España”. El dinero de las entradas ya adquiridas será devuelto a través de los canales habituales, mientras que la promotora del concierto ha mostrado su confianza en poder reubicar las fechas, incluida la de Vitoria, lo antes posible para llevar a cabo la agenda prevista a lo largo de 2022.
Por desgracia, esta circunstancia se está repitiendo mucho en las últimas semanas. Es de esperar que no suceda nada más y que el cartel previsto para esta noche no viva contratiempos. Será a las 21.00 horas de hoy cuando el Urban abra sus puertas, estando las entradas a la venta por 13 euros en anticipada y 16 en taquilla. Los primeros en hacer acto de presencia serán los madrileños Redención, que estarán presentando su última referencia, Derrota y destino, sin perder de vista su anterior EP, un Abruptum al que la pandemia le pilló casi justo recién salido. Hoy habrá tiempo para todo.
Tras ellos, llegará el momento de que el público del Urban se encuentre con Killus. Aunque pueda parecer una paradoja en plena pandemia y máxime cuando todavía las restricciones para los conciertos eran fuertes, los levantinos publicaron hace ya varios meses su primer disco de directo, Live in a Ghost World. Tal vez fue, en realidad, toda una declaración de intenciones por parte de un grupo que, como sin darse cuenta, va camino de cumplir un cuarto de siglo de camino en el metal industrial y el gothic metal. Otra de esas propuestas que, a buen seguro, si se hubieran puesto en marcha en el norte de Europa o en Estados Unidos tendrían mayor reconocimiento en la península del que tienen a pesar de su trayectoria creativa.