Una historia de segundas oportunidades, llena de giros y choques entre pasado y presente. Así es El inocente, la nueva serie de Oriol Paulo que llega a Netflix el 30 de abril, con Mario CasasEl inocente como protagonista de una trama integrada por Alexandra Jiménez, Aura Garrido y José Coronado. “Es una serie que habla de las segundas oportunidades, todos los personajes de la serie cargan con una mochila que poco a poco vamos viendo y al final todos van a tener que confrontarla”, cuenta a Efe en una entrevista el director Oriol Paulo.
La serie de ocho capítulos es una adaptación del best-sellerdel escritor estadounidense Harlan Coben y cuenta la historia de Mateo (Mario Casas), Mat, quien se ve involucrado en una pelea en la que accidentalmente fallece un joven, suceso que lleva al entonces estudiante de Derecho a prisión. “A mí lo que me atrajo del libro es cómo a un personaje que ha sufrido tanto, que es el de Mario Casas, de repente, cuando está a punto de arrancar una vida nueva después de todo lo que le ha tocado vivir por culpa de un accidente del destino, le explota una bomba y no sabe por dónde le vienen los palos. Me sentí muy angustiado poniéndome en la piel de Mat y eso fue lo que me atrapó de la novela”, explica el cineasta (Barcelona, 1975).
La historia arranca nueve años después de ese trágico punto de inflexión cuando Mat ya tiene una nueva y aparentemente tranquila vida con Olivia (Aura Garrido), su esposa. Una inexplicable llamada desde el móvil de Olivia mientras ella está de viaje lo descoloca todo y Mateo comienza una frenética carrera por descubrir la verdad.
Esta es la segunda vez que Paulo trabaja tanto con Casas (en Contratiempo) como con Garrido (en ContratiempoEl Cuerpo “Con Oriol hay algo muy bonito, que sigue llamando a los actores con los que ha trabajado. Hace una pequeña familia y se siente cómodo. Somos actores poco problemáticos, no damos quebraderos de cabeza y somos súper majos”, bromea Casas, reciente ganador del Goya al mejor Actor. El cineasta, prosigue, “es un tío maravilloso, muy listo e inteligente y cuando llegas al set tiene las cosas muy claras y eso para los actores es importantísimo, cuando ves al jefe con todo tan masticado y todo tan claro, es un gusto”, explica.
En opinión de Garrido, “verle trabajar es increíble. Tiene una cabeza… y esta serie es el ejemplo perfecto. Es una serie super compleja, con muchísimos personajes, muchísimas tramas, muchas cosas que van pasando, y tiene un tono muy delicado que hay que mantener siempre para no desvelar de más, para que los giros ocurran como y cuando tienen que ocurrir”, apunta la actriz. “Tienes que contar exactamente lo que tienes que contar, ni más ni menos, de su pasado y de su presente. Mantener ese tono fue lo más difícil”, dice Garrido. Y es que El inocente, insiste su director, “no se mueve en el blanco y el negro, sino en el gris. Y a veces se va al gris oscuro, al gris claro, a veces al negro y a veces llega al blanco... y jugar con toda esa gama ha sido lo más complejo”, señala Paulo.
A la trama de la pareja formada por Olivia y Mat se vincularán otras historias que transcurren en paralelo como la de Lorena Ortiz (Alexandra Jiménez), una inspectora de policía que investiga un caso de presunto suicidio y que volverá a cuestionar la inocencia de Mateo, alguien que “acarrea un peso del pasado que no le permite soltarse emocionalmente. Todo el viaje emocional que hace ella tiene que ver con el que hacen todos los personajes, que al final es enfrentarse a un sentimiento de culpa por cosas que no han podido resolver en el pasado y esta trama les va a obligar a todos a enfrentarse a la necesidad de realizar un cambio”.
Su contraparte de poli malo quien interpreta al inspector Aguilar, que trabaja para los servicios de inteligencia del Gobierno y que “es un hombre serio, no inspira mucha confianza, despierta recelos por su carácter”, “un trepa muy primario que quiere llegar a ser mejor pero que en el fondo tiene muchos complejos”. Recuerda mucho a esos oscuros policías a los que se alude cuando en los periódicos e informativos se hace referencia a las cloacas del Estado.
Y llega a la serie cargando en su “mochila del pasado” lo que sucedió en Marbella hace nueve años en un prostíbulo. Es uno de los grandes misterios de la serie y estuvo protagonizado por Aníbal (Miki Esparbé), Kimmy (Martina Gusmán) y Emma (Juana Acosta), que completan el reparto. “Emma es una mujer fuerte, con mucho carácter, celosa, que no perdona y con una gran necesidad de cambiar de vida, de darse una segunda oportunidad. Es uno de los asuntos importantes de la serie, las segundas oportunidades y el peso del pasado”, cuenta Acosta a Efe.