Un espacio para el deporte y para los espectáculos en vivo. En principio, esta doble función es la que cumple las instalaciones del Navarra Arena, aunque ahora el espacio pamplonés está ofreciendo una nueva faceta, la de sala de cine. O mejor dicho, de autocine. Ante el cierre de los lugares habituales de proyección y sin perder de vista las limitaciones de aforo y distancia social, la infraestructura está acogiendo una serie de proyecciones impulsadas por Golem y Nicdo. El martes (en la imagen), por ejemplo, se pudo ver Legado en los huesos.