madrid - Antonio de la Torre, Raúl Arévalo y Chema del Barco protagonizan El plan, adaptación de la obra de teatro homónima de Ignasi Vidal, que en esta ocasión dirige Polo Menárquez y que alerta de lo que se esconde tras los "pequeños comportamientos machistas". "El machista es un verdugo, pero también está sufriendo algo que no le libera", aseguró De la Torre durante una entrevista concedida a Europa Press con motivo del estreno este viernes de esta película, que presenta en escena a tres perdedores, Paco, Ramón y Andrade: tres amigos que se encuentran en paro desde que cerró la empresa de seguridad en la que trabajaban y que desvelan en una discusión algunos de sus mayores secretos.
De la Torre, que es el pequeño de tres hermanos, recordó la "cultura machista" en la que vivieron sus padres y que, a su juicio, "está muy arraigada" hoy en día, al tiempo que alerta de una "corriente retrógrada en el parlamento" y una "ola reaccionaria que recorre Europa".
En palabras del director de esta película, El plan retrata "de manera real, cruda y sin fuegos artificiales una realidad de personas que no llevan cuernos en la cabeza y que están integradas en la sociedad sin llamar la atención". "Los pequeños comportamientos machistas son los que alertan de lo que puede venir después", advirtió.
Para Menárquez, el hombre tiene en la actualidad la misión de hacer "autocrítica" desde la "honestidad y la verdad", por lo que esta película pone sobre la mesa el perfil de "tres hombres que están en la sociedad" y a los que cree que "hay que mirar con detenimiento y entender por qué son como son".
Raúl Arévalo, por su parte, da vida a Andrade, uno de estos tres amigos, que, "como muchos hombres, tienen unos valores muy vinculados a la masculinidad que ellos arrastran" y que esta película expone "desde la autocrítica" porque aún están "en el día a día". Por ello, más allá del "chascarrillo" y de lo "gracioso" que habrían resultado hace 15 años los comentarios de "estos tres machotes", espera que sea algo que se aparte de la sociedad. El plan pone la atención también en lo que ocultan las personas y muestra como la falta de comunicación es "un mal contemporáneo", según ha señalado De la Torre, para quien aún existen muchos "tabúes". "En la medida en la que no puedes mostrar tu fragilidad no puedes darte a conocer", señaló.