Vitoria - “Me dejo llevar por cada obra porque lo que más me interesa de este proceso es poder investigar”, jugar con formas y fondos para seguir dando pasos en un camino que justo estos días en ARTgia se traduce en su primera exposición individual. Otra mirada se llama esta propuesta de la artista alavesa Alba Tojo, que se puede visitar en el espacio de la calle José Lejarreta hasta el próximo día 28.
Son 14 los cuadros que la creadora de Murgia despliega en esta muestra, ejemplos de esas dos líneas que están marcando la senda mientras no paran de cruzarse. Por un lado, el trabajo con el retrato, pero no con un rostro al uso, plausible, reconocible, sino con caras realizadas a partir de retazos, donde en algunos casos lo humano y lo animal se confunde, formas que se conforman de trozos, que tienen texturas distintas, que nacen del collage. Eso sí, son piezas donde hay dos elementos comunes que resaltan a simple vista. Son el uso del color y la importancia que la autora confiere a los ojos: “dicen mucho de cada uno, son lo más expresivo de cada persona”.
Por otro, Tojo se sirve de estos retratos para ahondar en aquello que en estos momentos más le está ocupando, “los límites entre la pintura y en el grabado”, siendo éste último el escogido para desarrollar sus actuales producciones. “Me interesa mucho trabajar con el grabado, es algo que en Bellas Artes se estudia pero sin grandes profundidades y a mí me gusta ir más allá y ver qué puedo hacer”.
Desde esas dos bases, Tojo llega a un ARTgia a la que ha sido invitada a participar tras tomar parte las pasadas navidades en el mercado artístico que el espacio de Judimendi realizaba con la desaparecida enebada!. “Allí vieron lo que hacía y me propusieron esta exposición”, una muestra que se inauguró el lunes por la tarde y que va a permanecer abierta hasta el viernes de la próxima semana.
De todas formas, el proyecto cultural impulsado por Irantzu Lekue no sólo se encuentra celebrando su segundo aniversario y acogiendo esta nueva propuesta de una artista alavesa, sino que también tiene puesta la mirada en la programación que llegará en los últimos meses del año. Por segundo año consecutivo, ha llevado a cabo su convocatoria de ayudas destinada a la promoción y difusión de creadores locales y de sus últimas propuestas. En esta ocasión se han presentado 22 proyectos de los cuales han sido cuatro los elegidos para mostrarse entre septiembre y diciembre.
En concreto, se apoyará Hilarria de Alazne Payueta y Sara Rodríguez, que plantea un cementerio como la casa de esculturas creadas a través del hormigón y las flores; 4pArTE de Ane Gebara, que propone cuatro puertas, cuatro participaciones de cuatro mujeres; Wecandoit de Edurne Herrán que parte de los manuales de la firma Ikea que muestran figuras masculinas, para añadir presencias femeninas; y Basoratu de Piko Zulueta, que combina la creación fotográfica con el shirin yoku.