WASHINGTON. Swift, de 27 años, y Mueller, de 55, testificaron hoy durante la tercera jornada del juicio que les enfrenta y que empezó este martes en la capital de Colorado bajo gran expectación mediática.
"Fue un manoseo definitivamente, un manoseo muy largo. Fue intencional, se quedó agarrado a mi nalga. Noté como me agarraba la nalga por debajo la falda", dijo Swift durante su declaración, que duró cerca de una hora.
La cantante definió esa agresión como "horrible y chocante", y dijo que nunca antes le había pasado.
Cuestionada su versión por el abogado de Mueller, Gabriel McFarland, Swift respondió repetidas veces: "Su cliente me agarró la nalga".
Mueller, disyóquey y exlocutor de la emisora KYGO-FM, de la que fue despedido a raíz de la supuesta agresión, dijo que pudo haber rozado el trasero de Swift sin querer, aunque negó haberlo agarrado tal y como dice la cantante: "No, no lo hice".
"No me tocó la costilla -respondió Swift-, ni me tocó la mano, tampoco el brazo, me agarró la nalga".
La cantante pide una compensación simbólica de un dólar, mientras que Mueller reclama a Swift tres millones de dólares por daños y perjuicios.
Swift quiere que el juicio sirva "de ejemplo a otras mujeres que pueden resistirse a revivir públicamente actos igual de humillantes e indignantes".
La intérprete de éxitos como "You Belong with Me" fue la cantante mejor pagada de 2016 con 170 millones de dólares y ha obtenido 10 premios Grammy.
Se espera que el juicio se dure unas dos semanas.