Madrid - Lleva el oficio en la sangre, sus padres han trabajado en la radio y él recuerda haberse pasado muchas tardes de su etapa escolar en la sala de control de Radio Barcelona, esperando a su madre. Los deportes le vuelven loco, casi todos menos el fútbol. En 2007, se hizo cargo de las retransmisiones de los mundiales de motosGP en TVE. Cinco años después, los problemas económicos del ente y los elevados precios de los derechos de emisión obligaron a la cadena a prescindir de este evento. Ernest Riveras confiesa que echó de menos este deporte esos dos años que estuvo apartado de él. Movistar+, entonces sin la fusión con Canal+, le ofreció volver a los circuitos y él no se lo pensó dos veces. La temporada se presenta interesante, sobre todo después del enfrentamiento entre Valentino Rossi con Jorge Lorenzo y Marc Márquez.

La temporada pasada terminó con un Rossi enfadado con Marc Márquez y Jorge Lorenzo. ¿Qué va a pasar? ¿Temporada caliente?

-Marc y Lorenzo están por olvidar, dicen que pelillos a la mar, que lo pasado, pasado está. Pero Rossi dice que él no olvida. Veremos qué pasa, el ambiente estará caliente, eso seguro, pero esperemos que todo se mueva dentro de unos cauces de deportividad. Los tres son grandes corredores y sabrán lo que tienen que hacer.

¿Puede llegar la sangre al río?

-Esperemos que no. Esto es una competición deportiva.

Sí, pero con muchos intereses.

-Es cierto, pero no creo que pase nada, al menos espero que no.

¿Encuentra muchas diferencias entre retransmitir los campeonatos de motos en TVE o en una cadena de pago?

-Hacer una retransmisión temática te obliga a más esfuerzo. Para nosotros las emisiones son de jueves a domingo. Antes, en Televisión Española, los jueves solo íbamos a hacer los informativos de los Telediarios.

¿Se ha cambiado a Movistar para trabajar más?

-No. TVE dejó las motos y llegó la oportunidad de hacerlo en un canal de pago. Me gusta el mundo del motor y estoy encantado de poder hacer todo el despliegue que te permite el canal. Nosotros los jueves comentamos todos los entrenamientos, hacemos previos? El domingo es un día larguísimo para mí y para el resto del equipo de Movistar+ motos.

¿Una paliza?

-Bueno. No lo calificaría de tal, pero sí que nuestras retransmisiones están muy trabajadas. La carrera acaba y nosotros seguimos ahí, al pie del cañón, hasta dos horas después. Es diferente en cuestión de retransmisiones, no vas encajonado entre una película y el informativo, no hay prisas. Pero es igual de riguroso.

¿Hay diferencia de espectadores entre una cadena generalista como TVE o Telecinco y Movistar+?

-Son los mismos, son seguidores de este tipo de eventos deportivos que han tenido que emigrar de una tele a otra. Fíjese que nosotros damos en exclusiva 14 de las 18 carreras; Telecinco da cuatro.

¿Habrá novedades?

-Tecnológicas. Nuestro objetivo es mantener la calidad de los dos años anteriores.

¿Qué diferencias hay en la oferta?

-Dar más horas que nadie, tener a los mejores comentaristas, que no haya cortes publicitarios? Va a haber un mosaico mayor de imágenes, pero ese no es un tanto que se tenga que apuntar Movistar+, forma parte de la evolución de Dorna.

¿Ha cambiado mucho la forma de retransmitir desde que usted comenzó con las motos en TVE?

-No tanto. Yo estuve retransmitiendo desde 2007, es un pasado bastante cercano en tecnología. Más que cambiar, hemos evolucionado.

Un apasionado del deporte en general, ¿de las motos en particular?

-Me gusta el deporte, soy apasionado de mi trabajo, me encanta hacer televisión alrededor del deporte, pero no fútbol. Me he ido adaptando a los diferentes formatos que me han ido dando desde que entré en Televisión Española. He sido siempre el comodín para todos aquellos deportes que tenían un cambio o entraban en los Juegos Olímpicos.

Son temporadas duras, con viajes continuos y alejamiento familiar.

-Es cierto, después de cinco temporadas continuas puedes llegar a estar muy saturado, pero notaba que me faltaba algo.

¿El rugido de las motos?

-Pues sí, es apasionante. 2012 y 2013 no fueron fáciles porque no tenía motos. Estuve en los Juegos Olímpicos pero me faltaba el motor, así que cuando me llegó la oportunidad de trabajar de nuevo en este tipo de retransmisiones, fue una alegría.

No me diga que esa vida no tiene ningún coste personal...

-Sí, claro que tiene un coste. Estás alejado de tu familia, te pasa factura y duele en ocasiones. Pero no ha ocurrido solo con el mundo de las motos: estuve diez años haciendo ciclismo, Juegos Olímpicos, campeonatos de Atletismo por todo el mundo. Mi familia está acostumbrada.