Vitoria - Gracia Chacón es una de las pocas mujeres archidruidas. La nombraron por unanimidad en un acto celebrado el 25 de septiembre de 2010 en Avebury (Inglaterra) por las Órdenes Druídicas Británicas y la Comunidad Pagana. Entonces, esta técnica en Radiología nacida en Asturias y afincada en Bizkaia ya llevaba 13 años transitando el camino de la cultura celta, estudiando, formándose y compartiendo con otros lo aprendido en este viaje de reconexión con la naturaleza y con la esencia humana y de respeto por los antepasados. Parte de estas vivencias las ha plasmado en su primer libro, El enigma de la gruta sagrada, editado por Eunate, que la autora dará a conocer esta tarde, a partir de las 19.00 horas, en la tienda Rhiannon Arte y Cultura Celta.
Chacón mezcla leyenda y ficción en este volumen escrito “de la manera más sencilla posible” para llegar tanto a iniciados como a lectores que no conozca nada de la cultura celta. Emprendió su escritura con el deseo de “poner en su sitio” y de algún modo hacer justicia a un ser mítico, Eoghan, el Señor de las Bestias o de los Bosques. “Entre 1987 y 1997 estuve viajando continuamente a Inglaterra para formarme y en una de esas idas me contaron su historia, y me enamoró”, cuenta. “Es un personaje que tuvo a una orden druídica a su servicio, aunque vivía de un modo contrario a las prácticas normales”. Y lo explica: “En el mundo celta se vive mucho la idea de clan, de unidad, y estos seres eran anacoretas, solitarios, se mimetizaban con la naturaleza, aprendían el lenguaje de los árboles... Eran diferentes, pertenecen a una casta ya desaparecida, pero a mí me gustó porque consiguió unir los opuestos entre la tierra y el agua, entre lo masculino y lo femenino, y eso en una sociedad como la nuestra, donde sigue la lucha de género, es especialmente interesante”. De hecho, en la novela se ve cómo los dos personajes míticos que conforman una parte del relato, Deirdre y Eoghan, “son complementarios”.
retazos de una verdad El texto se compone de esas leyendas, recreadas con toques literarios, así como de la historia ficticia de Claire Stone, una joven heredera del siglo XXI que recibirá un legado cuyos secretos deberá ir desvelando, y de las experiencias, vivencias y ceremonias que Chacón ha experimentado en su faceta de druida. En definitiva, esta publicación trata de mostrar que los opuestos bien pueden encontrarse y que “no podemos ir por la vida solos”. “Yo soy una druida de mi tiempo, pero me da pena que las relaciones humanas hoy se basen en mensajes de móvil. Hay un tiempo para todo, para disfrutar de las tecnologías que nos facilitan la vida, pero también para volver a la naturaleza, a la esencia del ser humano, al lenguaje oral, a mirar a los ojos”. Y dice que su mayor expectativa con el libro es que la gente que lo lea “tome conciencia de que la naturaleza nos da señales que muchas veces somos incapaces de ver porque tenemos unos ojos hartos de mirar sin ver. Mi mensaje final sería: por favor, mira lo que te rodea, observa, vive en consecuencia”. Con esto no quiere decir que cualquier tiempo pasado fue mejor, “ni mucho menos”, sino que “tenemos que reordenar nuestro sistema de valores y vivir de acuerdo a lo que creemos”. En ese sentido, el druidismo “no es más que retazos de una verdad; te enseña a no ser intransigente y a respetar tu libertad y la de los demás”.
Después de estudiar diez años en Inglaterra, Chacón continuó formándose en Escocia, Irlanda, etcétera, hasta el año 2000, cuando empezó también a compartir sus conocimientos con otros, gente de todo tipo, desde médicos hasta abogados, en las clases que imparte en su caserío de Zeanuri. Después de todo este tiempo, sabe que ser druida es “una consecuencia de vida”. “En el druidismo no aprendes nada que ya no sepas; lo que sí es cierto es que te quita las excusas y te hace ver la realidad como es, sin adornos”. Además, en su escuela (Orden Mogor), “no creemos en los dogmas, sino en que toda creencia evoluciona a medida que tú evolucionas”. Será por eso que sus alumnos buscan “algo que creemos que hemos perdido, pero que sigue ahí, que es reconectarnos con la naturaleza, que espera a que volvamos a ella, pero no como dueños de nada, porque no la poseemos”.
En la capital alavesa. Gracia Chacón presentará ‘El enigma de la gruta sagrada’ hoy a las 19.00 horas en la tienda Rhiannon Arte y Cultura Celta, un espacio que se encuentra ubicado en la calle Cercas Bajas 21.
La anécdota fundacional. Los asistentes podrán saber cómo Gracia Chacón emprendió la ruta del druidismo en 1987, en un viaje que tenía otro objetivo y que dio un giro para descubrirle al que sería su mentor, Terry Dobney.