Ayala - Ha fotografiado desiertos, selvas tropicales, glaciares, volcanes, mares y montañas en los cinco continentes, y hace veinte años que trabaja como fotógrafo de la naturaleza viajando por el mundo. Es del periodista navarro (Tudela 1969) y graduado en fotografía en el London College of Printing, Andoni Canela Urizar. Un profesional ya acostumbrado a que sus imágenes aparezcan en medios de comunicación como National Geographic, Newsweek o Sunday Times y que, el próximo marzo, visitará el Valle de Ayala para transmitir sus conocimientos a las 15 personas que logren plaza en el taller que ha organizado Blackkamera, para los días 7 y 8 en Respaldiza.
Y es que este proyecto de docencia fotográfica, creado a principios de 2012 en el Valle de Ayala, quiere acercar a sus clases a uno de los máximos exponentes en fotografía naturalista del país. No en vano, Canela -además de llevar a sus espaldas una veintena de exposiciones individuales y colectivas en Portugal, Italia, Inglaterra y Corea- también ha realizado proyectos destinados a documentar la biología de la fauna amenazada de distintos hábitats, sin olvidar que ha fotografiado en libertad especies emblemáticas de la fauna ibérica que van desde el oso pardo y el lince hasta el lobo ibérico. De hecho, un reportaje suyo sobre este último animal recibió en 2009 el Premio Godó de Fotoperiodismo, y uno de sus libros más destacados y traducido a varios idiomas es La Mirada Salvaje. Encuentros con la fauna ibérica.
Con esta trayectoria no es de extrañar que su paso por tierras ayalesas haya sido aprovechado para que ofrezca -el 6 de marzo en el Ayuntamiento de Ayala, en Respaldiza- una charla en la que contará su experiencia retratando lobos, desde la sierra de la Culebra hasta los Picos de Europa. “Es el resumen del proceso de veinte años de fotografía de lobos. La evolución desde reportajes para revistas y periódicos hasta convertirse en un proyecto personal y dar paso a un libro. La observación de fauna en estado salvaje. Conocer el paisaje y saber leer el entorno, aderezado con las peculiaridades del lobo ibérico. Una especie superviviente”, adelanta Canela.
Al día siguiente, el 7, comenzará el curso (se puede pedir información en info@blackkamera.com) con una mañana de teoría a la que los inscritos deberán prestar atención, ya que después de comer y hasta el anochecer, así como al amanecer del domingo 8 se llevarán a cabo salidas fotográficas para poner en práctica lo aprendido.
Algunas de las cuestiones en las que incidirá Canela es que “para fotografiar la naturaleza hay que amarla y sentirla. Andar, observar y saber esperar el instante. Nunca se repite el mismo momento. Incluso el mismo paisaje a la misma hora cambia cada día. Buscar lo que a cada uno le seduce especialmente, y una vez que lo sentimos, darle nuestra mirada personal. Un detalle o un gran paisaje”, explica, al tiempo que aconseja “fotografiar con paciencia y cuidado, ya que un simple movimiento puede cambiar totalmente una composición; así como dejar libre la intuición”. Eso sí, todo ello siempre que se tenga una experiencia que pueda anticipar el resultado, basado en la técnica, subraya. - A. Oiarzabal