Coincidiendo con el 20 aniversario de la firma del Acuerdo de Gestión del Guggenheim Bilbao con Nueva York, los responsables del museo han decidido festejarlo con una gran exposición en la que se exhiben las joyas de las colecciones de la Fundación de Nueva York y de la de Bilbao. Comisariada por Álvaro Rodríguez Fominaya, Lucía Agirre y Petra Joos, El arte de nuestro tiempo. Obras maestras de las Colecciones Guggenheim sigue un cierto orden cronológico y se ha inaugurado en dos fases. Hace un mes se abrió al público en la tercera planta del edificio de Gehry la primera parte de la muestra con la obra de los artistas que desarrollaron el movimiento cubista, expresionista y abstracto en el París de principios del pasado siglo XX. Y ayer, se presentó la segunda fase, dedicada al periodo artístico comprendido desde el arte pop y las corrientes de finales del siglo XX, cerrando este recorrido por los 100 años de historia del arte contemporáneo.

Tras recorrer la planta tercera, el espectador se topa, nada más entrar a la sala 205, con una de las obras de la serie Los Encapsulados del artista donostiarra Darío Villalba (1939), que pertenece a Nueva York y es la primera vez que se puede ver en Bilbao. Sus esculturas son fotografías de seres atrapados, atormentados, inmersos en cápsulas de metracrilato.

En la misma sala se pueden ver otras obras conocidas ya en Bilbao como son Cápsula flamenco, de James Rosenquist, dedicada a los tres astronautas que murieron a bordo del Apollo 1 en 1967; Ciento cincuenta Marilyns multicolores, de Andy Warhol, e In, de Roy Lichtenstein.

La sala 206 está dedicada íntegramente a dos de las figuras más influyentes de la escena artística de la segunda mitad del siglo XX: Cy Twombly y Robert Rauschenberg. Los Nueve discursos sobre Cómodo de Twombly, adquirida por Bilbao en 2007 por 20 millones, está compuesta por nueve grandes lienzos y representa la caída del Imperio romano personificada en el emperador Aurelio Cómodo, el último tirano de Roma. La obra de Twonbly dialoga con Barcaza (1962-1963), de Rauschenberg, que el artista realizó en 24 horas y que ha sido definida por algunos críticos como una “película en blanco y negro en movimiento”.

La sala 202 está dedicada a la serie de mujeres sonrientes del artista estadounidense Alex Katz, once retratos que el Guggenheim Bilbao adquirió en 2007 por 1,7 millones. Desplegada en una galería próxima, se encuentra Ciudad muralla, un ejemplo representativo de las ciudades del escultor valenciano Miquel Navarro. En la planta segunda, se ha incluido un espacio dedicado a Boltanski, quien a través de viejas fotografías, ropa y artículos personales evoca vestigios de vidas de otras personas. El espectador también puede ver Mural n. 831 de Sol LeWitt, que se adapta perfectamente a la arquitectura curvada de la galería, fusionándose con el entorno arquitectónico.

El recorrido expositivo concluye en la primera planta con algunas de las adquisiciones más recientes, con presencia de obras de artistas de Corea, China, Palestina, Etiopía, Ghana, Camboya y China, entre otros. Entre la variedad de temas que estos autores exploran se hallan la identidad, el exilio, la memorias, la violencia física o la represión. Así, se puede contemplar el primer cuadro de la colección propia del futuro Guggenheim de Abu Dhabi que ha salido del país árabe, obra del artista ghanés El Anatsui, titulado Piel de la tierra, de 2007, realizado con aluminio y alambre de cobre. Destaca también una obra en madera de Ai Weiwei, encarcelado por su activismo político en contra del régimen chino, titulada Madero de China, de 2005.

Acompañan a estas creaciones una escultura de la donostiarra Cristina Iglesias y otra del bilbaino Txomin Badiola. El arte vasco tiene también más presencia con espacios monográficos en la tercera planta dedicados a dos de los escultores más universales: Eduardo Chillida y Jorge Oteiza.

Son 150 obras entre pinturas, esculturas e instalaciones de la colección Guggenheim.

Recorrido. se inicia en la tercera planta con artistas que desarrollaron el movimiento cubista, expresionista y abstracto en el París de principios del pasado siglo XX. (Hasta el 25 de enero). En la segunda planta se incluye una gran selección de piezas de la colección de Bilbao. El recorrido concluye en la primera planta con algunas de las adquisiciones más recientes de arte contemporáneo y emergente de las Colecciones Guggenheim (hasta mayo).