Vitoria. El Ejecutivo de Javier de Andrés anunció ayer que, tras muchos años de reclamación por parte del sector, la Diputación ya ha regulado la actividad artesanal en Álava de modo que, a partir de ahora, se dispone "de una normativa que define las actividades que se consideran artesanales y se actualiza el Registro de Artesanos Alaveses".

Según informó el Gobierno del territorio en una nota, la normativa define, regula y protege la actividad artesanal, realizándose estas acotaciones con la participación de los "representantes de las principales asociaciones alavesas como Artisau, Arbaso o la Comisión Araba, así como artesanos independientes".

En esta nueva normativa, se incluye el repertorio de actividades que se consideran artesanales, entre las que se encuentran el esmalte, cerámica, alfarería, porcelana, talla en vidrio, patchwork, macramé, trajes tradicionales, repujado o elaboración de calzado. También se recogen otras actividades de creación, producción, restauración o prestación de servicios, como por ejemplo, encuadernación, cestería, bisutería, juguetes, cosmética natural, etc.

Asimismo, la Diputación ha duplicado la partida de ayudas destinada al sector artesanal hasta alcanzar los 60.000 euros, con el objetivo de potenciar su competitividad. Para ello, "y con la finalidad de proteger a los auténticos artesanos, se ha regulado el Registro de Artesanía de Álava", donde se definen los requisitos de pertenencia a este sector, "una medida, que permitirá canalizar de forma directa las ayudas de la Diputación a los talleres, productores y empresas que apuestan por estas actividades tradicionales". Además, se ha actualizado la constitución y funcionamiento del Consejo de la Artesanía de Álava, un órgano de asesoramiento e información de la Diputación que tendrá un carácter consultivo para el desarrollo y promoción de la artesanía y que facilitará la participación del propio sector.

Por otro lado, el Ejecutivo foral aprobó ayer también las cantidades ya conocidas que la Diputación aportará en 2014 a las fundaciones que rigen los caminos de Artium (1,8 millones de euros) y Catedral Santa María (700.000 euros).