AUSTRALIA. Aunque falta todavía varios permisos oficiales, este magnate de la minería ha encargado en China la fabricación de 165 dinosaurios robóticos que ubicarán en el bosque de su lujoso centro vacacional de Coolum, de 150 hectáreas de extensión y situado en Sunshine, en la costa nororiental.
Este pedido de robots que rugirán, moverán la cola, ladearán sus pechos y pestañearán, incluye réplicas de animales de aquel periodo de hasta 1.200 kilos y 20 metros de altura.
Uno de los robots más espectaculares que se exhibirá en Coolum será la de un Deinosuchus, una enorme bestia prehistórica que se cree que llegada a tener una altura de hasta 15 metros y pesaba 9 toneladas y que es antepasado de los actuales cocodrilos, que aún siguen siendo un peligro real en Australia.
Aunque "algunos de los dinosaurios tendrán un aspecto feroz", al tocarlos el público tendrá la sensación de que fueron adorables como los koalas", aseguró el gerente de Coolum, Bill Schoch.
Según indicó la prensa australiana, los fabricantes han entregado ya cerca de medio centenar de estos gigantes aparatos e incluso alguno ha sido colocado en Coolum, incluidos réplicas de un temible Tiranosaurio Rex mecánico, bautizado como Jeff, y de un Omeisaurus, que llegó a medir hasta 15 metros de largo, llamado Bones (Huesos).
"Si solo han visto a Jeff y Bones, entonces no han visto todavía nada", señaló Palmer en un comunicado de la empresa en el notificaba que se había decidido acelerar el proceso de construcción del parque, que se baraja pondrán el nombre de "Palmersauria".
Aunque la compañía guarda en secreto el nombre que pondrá a este parque, el gerente de Coolum adelantó que figurará el apellido del excéntrico magnate minero, dado que sus propiedades se llaman Palmer Resort, Palmer Golf, Palmer Grill y el museo de coches de época Palmer Motorama.
La iniciativa de Palmer, cuya fortuna asciende a 795 millones de dólares (619 millones de euros) según cálculos divulgados en 2012 por la revista Forbes, parece que se topa con la burocracia a la de solicitar los permisos a las autoridades locales.
Russell Green, concejal del municipio de Sunshine, dijo a la emisora local de la cadena de radio ABC, que el multimillonario se está arriesgando demasiado por comprar las réplicas de los dinosaurios sin que el proyecto haya recibido la aprobación.
"El personal del concejo no ha empezado a evaluar el proyecto porque el señor Palmer tiene que proporcionar la información adicional que se le ha pedido", precisó Green.
Pero el excéntrico multimillonario, recordado en Australia por acusar a la CIA de supuestamente ayudar al movimiento ecologista para cerrar la industria del carbón, parece determinado a llevar hasta buen fin su proyecto tras haber conseguido otros de tanta o mayor envergadura.
Uno de sus planes más recientes ha sido encargar la construcción de una réplica exacta por dentro y fuera del transatlántico Titanic, que se hundió en abril de 1912 con unos 1.300 pasajeros a bordo.
El Titanic de Palmer, que será construido en China y tendrá 270 metros de eslora, 53 metros de altura y 40.000 toneladas de peso, y tiene previsto realizar su primer trayecto en 2016 entre Southampton y New York.
Sobre la seguridad de su Titanic, Palmer dijo a la prensa, que, "uno de los beneficios aportados por el calentamiento global es que ya no hay muchos icebergs en el Atlántico Norte".