MADRID. Más de doce mil personas se dieron cita en el Palacio de los Deportes de la capital para presenciar uno de los directos incluido en la gira "Symphonica: The Orchestral Tour", en la que cerca de cuarenta músicos arropan al ganador de dos Grammys.

Con casi media hora de retraso comenzaron a sonar las primeras notas "Through". Segundos después se abrió el telón rojo que cubría hasta entonces el escenario, mostrando a un sonriente George Michael en lo más alto de la tarima.

Enfundado en un elegante traje negro y cubriendo sus ojos con unas gafas oscuras, el artista de origen griego descendió por la escalera central al grito de "Buenas noches Madrid", que dio paso a "My Baby Just Cares For Me", de Nina Simone, canción a la que se entregó con enérgicos movimientos.

Pero el arranque inicial pronto se vio frenado por una intimista interpretación de "Understand", a la que siguió la de "Cowboys And Angels", de su álbum "Listen Without Prejudice", que fue coronada con un precioso solo de saxofón.

El primero de los homenajes de la noche fue para el cantautor Rufus Wainwright, del que tomó prestado el tema "Going To A Town" para elevarlo por encima de la orquesta gracias a su portentosa voz.

La aplaudida "Kissing A Fool" y "Let Her Down Easy", de Terence Trent D'Arby, en la que el piano cobró especial relevancia, abrieron el camino a "You Have Been Loved", que el músico y productor dedicó a su madre.

"Idol", de Elton John, con el que George Michael comparte su compromiso contra la homofobia, y la emocionante "Brother Can You Spare A Dime" cerraron la primera parte del espectáculo.

Veinte minutos después, con la enorme pantalla situada tras la orquesta proyectando sugerentes imágenes espaciales, apareció de nuevo sobre las tablas George Michael, que inauguró el segundo acto con "Patience".

La inquietante "John And Elvis Are Dead" cedió el testigo a "Roxanne", de The Police, que el autor de algunos de los clásicos de los ochenta llevó al terreno del jazz con la ayuda del eficiente coro con el que cuenta en esta gira.

"Este es un tema nuevo", comentó el cantante antes de lanzarse a "Where I Hope You Are", que precedió a "You've Changed", que inundó de melancolía el recinto madrileño.

Sirviéndose del efecto del vocoder, Michael presentó a continuación una futurista versión de "True Faith", de la banda británica New Order, tras la que llegó "Love Is A Losing Game", con la que rindió homenaje a la fallecida Amy Winehouse.

Una potente revisión del tema "Russian Roulette", de Rihanna, "Praying For Time" y la glamourosa "Feeling Good" pusieron punto y final a un show que aún tendría dos continuaciones en forma de bises.

El primero de la mano de un popurrí compuesto por tres de los clásicos de su carrera: "Amazing", "I'm Your Man" y "Freedom! '90", tema incluido para agrado del personal y del que la grada celebró con efusividad cada estribillo.

Los aplausos de los presentes hicieron que George Michael regresara por segunda y última vez al escenario. Lo hizo para dejar una magnífica "I Remember You", en la que se acompañó, casi exclusivamente, del melodioso sonido del arpa.

Tras su paso por Bilbao y Madrid, la gira "Symphonica: The Orchestral Tour" llegará el 27 de septiembre al Palau Sant Jordi, Barcelona, donde ya se han agotado todas las localidades.